Mi Tío el Loco

Ahí va otro rincón curioso de Valencia. ¿Tienes más ganas de juerga y te niegas a salir solo los fines de semana? Mi tío el loco y no es una afirmación que también. Es un pub que abre todos los días de la semana en el barrio de Malilla. Este local está en la calle Pedreguer en el número 9 y es un garito muy auténtico.
La fauna que podréis encontrar en su interior es de lo más variopinta. Hay mucho espacio y las copas están a buen precio unos 5 euros y los chupitos rondan los 3 euros. Como todo garito auténtico, tiene su elemento sorpresa. Sí, lo tiene. Es un Karaōke. ¿Qué me comentáis? Auténtico y curioso. En Valencia se ha ido perdiendo esta sana costumbre de canturrear medio borracho y quedan muy pocos karaokes en la ciudad y casi siempre se concentran por la zona centro.
Para mi una de las principales ventajas de este singular local, es que abre todos los días, que la música es pop rock de los 80 o como diría un amigo, la típica de cualquier verbena de fallas y que el ambiente está bien. Hay fauna muy diversa pero la cuestión es pasárselo bien cualquier día de la semana.
El único pero no tiene que ver con el local sino con la zona. Es bastante complicado aparcar, así que paciencia hermanos.

¿Quién no ha pensado alguna vez en pasar una noche de karaōke con los amigos?
Mis amigos y yo lo pensamos y allí fuimos. A uno de los pocos karaokes que aún se mantienen abiertos: Mi tío loco.
En él puedes encontrar personas de todas las edades; chicos cantando canciones de Melendi, hombres luciéndose a lo Nino Bravo… y algún que otro gallo, todo vale. Puedes entrar, tomar una copa (5 €) y cantar hasta que se acabe el cancionero… risas por los que cantan bien y… por los que no lo hacen tan bien.
Es un lujo poder cantar canciones del momento en un karaōke. Si tienes la oportunidad, coge a tus amigos y ponte a cantar hasta que la garganta se quede sin palabras…
Yo os prometo que me río y eso que, como dice mi madre, no tengo sentido del oído…

No es una coña hay un pub en Valencia que se llama así. Una noche una amiga me invitó a cenar a su falla, no recuerdo muy bien el motivo. Son bastante activos en la comisión y tienen bastantes actos a lo largo de año. Como ya he ido varias veces ya conozco a bastante gente allí. Para completar la introducción diré que la falla está en el barrio de Malilla. Cuando terminamos de cenar nos bebimos un par de copas hasta que a uno se le ocurrió proponer cambiarnos de sitio y comentó que podría ser buena idea ir a Mi Tío el loco. Al principio pensé que estaba de coña y no le hice caso. Cuando vi que el resto le seguíà la conversación pensé joe cuanto duran aquí las bromas a ver cuando se ríen y se acaba. Como vi que la cosa iba en serio porque se levantó todo el mundo para ir a Mi tío el Loco no tuve más remedio que preguntar a mi amiga Donde c… vamos María? Es un karaōke que hay aquí detrás ya verás como nos lo pasamos bien, me contestó.
El lugar es un tanto peculiar, igual te encuentras dos jovenzuelos de 20 años como dos matrimonios de 50 que por cierto son los que más se animan a cantar. La verdad es que no estuvimos mucho rato, pero si que nos reímos un montón con la gente que salía a demostrar su valía. Hay gente que se lo toma muy en serio y no sólo canta hace un poco de show que es lo que más gracia hace.