Entré por que los restaurantes de la zona, por la playa, tenían críticas bastante duras en contraste con otras sospechósamente buenas. Algun dueño incluso se atrevió a criticar su propio negocio, poniéndo su nombre y dejando bien claro que era uno de los dueños, BIZARRÍSIMO! No quise jugármela. Entré en este sitio, que tenía unas críticas muy buenas decidido a probar el menú, que es donde muchos fallan(al ser más barato se columpian que da gusto) 6 Primeros, 6 segundos y postre o café. No incluye bebida. Su único punto negativo… un refresco-caña-tinto de verano no le cuesta a un negocio ni 20 céntimos. En fin. Vamos a lo bueno! Pido puntillitas de primero y paella de segundo. Me traen el primero rapidísimo acompañado de un plato con 4 generosos trozos de pan tostado con mantequilla. Detallazo, estaba delicioso. El plato de puntillitas muy grande, con su rajita de limón. Estaban muy buenas. La paella también en cantidad muy generosa, con mucho ingrediente, con el arroz en su punto, muy bien! El chaval jovencete que me tomó nota del café muy agradable y simpático. El café tal y como se lo pedí(parece fácil pero muchos camareros parecen no entender lo de «corto de café por favor») y bastante grande :) 12 Euros por este menú, el trato, y en un sitio a 100 metros de la playa de El Saler es simplemente comerse a su mediocre competencia. MUCHOMASQUERECOMENDABLE