Llevo tiempo acudiendo a este restaurante, la verdad esque no se me ocurre crítica alguna ya que es el mejor chino-taiwanes en el que podrías comer en Valladolid. Sus propietarios son un matrimonio muy amable que apuesta por la comida tradicional y sencilla, totalmente autentica.(nada de mafias asiaticas a uso… jeje) Tiene una carta no muy extensa pero vale la pena arriesgarse y dejar de lado el arroz tres delicias y el rollito de primavera(que también están riquísimos). Inprescindible probar las empanaditas de carne ‘shui jiao’, hechas a mano, las sopas, el pato FORMOSA… y un largo etc. Un saludo.