Estación de servicio en la CV50 en el casco urbano de Vilamarxant. Tiene una tienda pequeñita aunque al ser una gasolinera urbana es lo normal. La plantilla, todo chicas, es muy simpática y agradable. Sólo hay una persona en el turno de mañanas y eso se nota por las colas que se forman, pues la misma persona que te pone el combustible también te tiene que cobrar. Y hay pocos surtidores de diesel. El inflado de ruedas es gratuito y funciona perfectamente, cosa que en muchos otros sitios no se puede decir. Las mangueras de lavado de coches son de las que no tienen cepillo y podría mejorarse, aparte que en alguno de los lavaderos faltan algunos botones. Hay aspiradores estropeados también.