La Rinconada de Lorenzo

Le pongo 4 estrellas. No fui antes de la actual remodelación, aunque creo que la dirección pertenece a los mismos dueños. Así que, no puedo comparar.
Ahora es un lugar agradable, de trato muy correcto, bonito (mezcla de aceros, vidrios, maderas y cerámica de Muel) y con unos cuantos platos de impresión.
Por otro lado, es algo caro y en la carta (que es lo que he probado) hay platos de todos los pelajes; grandes aciertos junto con otros que son sólo pasables y francamente disparatados de precio.
Os pondré ejemplos de lo que digo: En la parte positiva (como decían en aquel concurso), las EXCELENTES Borrajas en salsa verde con almejas… Dios mio, una delicia! ;Las migas Completas, con todo… pero todo bueno; huevo, jamón, uva y longaniza (la mayoría de las mesas pedían, al menos, un plato para probarlas); la ensalada de conejo escabechado y frutos rojos, también muy buena. Los chipirones a la plancha con pimientos de Padrón muy ricos.
Y en la parte Negativa: Las costillas de Ternasco sólo pasables y a 16 € muy, muy caras.
La Paletilla de ternasco asado al horno… muy normalita.
El Bacalao confitado con Habitas Baby, me gusto; lo dejamos en un término medio.
Por último, que no menos importante, los postres; de los de toda la vida, a saber: Flan, Arroz con leche, Melocotón con Vino, Tiramisú, Sorbete de Limón. Probé el Melocotón con vino, magnífico, un acierto, un melocotón entero (como debe ser) nadando en un riquísimo vino. El tiramisú, bueno, sin más. El sorbete también bien.
El vino, el pan y los cafés son buenos y están a buen precio.
Volveré… como Arnold, pero esta vez a probar el Menú Degustación a 18 € que tienen Lunes, Martes y Jueves (que no sean víspera de festivos).

Cena en grupo. Entrantes para compartir abundantes y ricos (ensalada, piquillos rellenos, migas y huevos rotos). De segundo plato elegí merluza y no estaba tan bien. Tal vez debería haber elegido alguna otra especialidad. Servicio atento y agradable y con buen ritmo.

Carácter mudéjar
Un salón bien decorado incluyendo azules azulejos, comida aragonesa de calidad y camareros rápidos. Precio entre 25 € los menús de picoteo, 30 € el menú aniversario que incluye primero, segundo, postre y en carta depende lo que pidas, unos 38 € por cabeza nos costó a nosotros.
Para fumadores también tienen terraza cubierta.
Solamente una queja, de ahí la nota, y es que teniendo el salón con la mitad de mesas libres, y habiendo reservado, nos sentaron en la mesa pegada a una entrada y una columna, pasando constantemente camareros.
Espero volver y cenar más tranquilamente, y subir la puntuación.

Un restaurante con 45 años de antigüedad y experiencia en cocinar el Ternasco de Aragón, la borraja y demás productos aragoneses. El sitio indicado para comer la verdadera comida tradicional aragonesa, guisos, asados y demás platos archiconocidos por todos.
Recientemente remodelado con mucho gusto, pero aún en sus paredes se exhiben los recuerdos atesorados en este casi medio siglo de vida
Su fundador Don Lorenzo Navascues nos lega, aparte de sus jotas, una amplia trayectoria que ahora continúan sus hijos, sus nueras y sus nietos.
Menu y carta con platos elaborados con materias primas de excelente calidad. Las migas me parecieron impresionantes, las mejores que he comido.
Una gran carta de vinos donde las bodegas aragonesas ocupan un lugar destacado.
Un buen sitio donde comer a la manera tradicional pero con matices de modernidad que aportan a la cocina de este restaurante el balance perfecto para el disfrute de todos los que se deciden por La Rinconada de Lorenzo.

Iba al país vasco en coche cuando de repente me entró el apetito a la altura de Zaragoza. Me recomendaron un restaurante hace tiempo por si pasaba alguna vez por Zaragoza y solo me acordaba de la palabra «Lorenzo». Acudí a Unilocal y finalmente lo encontré.
Desde el primer momento que traté con ellos me demostraron su amabilidad y servicialidad. Llamé desde el coche para que me reservaran mesa y me desearon un buen viaje.
Al llegar, la mesa ya estaba puesta con un bollito de pan. En seguida nos tomaron nota:
— Migas completas con jamón, longaniza, huevo y uvas.
— Paletilla de ternasco.
— Jarrete de ternasco.
— Helado de higos.
— Agua y copa de vino.
Como éramos 2 personas y queríamos compartir, nos dividieron en 2 platos individuales tanto la paletilla como el jarrete. Ambos platos muy ricos, sobretodo la patata de guarnición. A gusto personal, me hubiera gustado que la piel de la paletilla estuviera crujiente. El jarrete se deshacía en la boca.
Las migas estaban muy ricas, nada aceitosas y perfectamente separadas. La uva le daba un toque dulce al plato muy singular. No hubiera estado mal que la uva no tuviera pepitas.
El helado también estaba muy bueno, aunque tampoco me sorprendió demasiado ya que en la zona de levante tenemos muy buenos heladeros artesanos. Salimos a 30 € por persona, quizás algo elevado de precio a pesar de que la calidad era óptima.

A truly traditional place in the city. Family-​run and the owners could not be friendlier or more accommodating. They took time to explain dishes which we were not familiar with like Migas. It is bread crumbs cooked in lamb fat as a base for grapes and chunks of ham, all topped with a fried egg. It is a meal which was eaten by workers who performed hard labor and had very little money to spend on food. The dish is large and can be shared. The flavors burst with every bite. It was addictive.
The longaniza and chorizo are beyond words to describe their flavor intensity.
Two specialties need to be highlighted. The ternasco asado (braised lamb shoulder) and borrajas con almedas (a green vegetable grown only in this region cooked with clams).I have eaten lamb in hundreds of restaurants and nothing can compare with the tenderness and intense flavors of this dish.
If you visit Zaragoza and miss this restaurant, you will have missed one of the great food experiences of your life. Two people can eat for about $ 25 pp and have an exquisite culinary experience.

Las mejores migas que uno puede comer en Zaragoza, de lejos, se hacen en la Rinconada de Lorenzo. Trabajadas a la manera antigua y tradicional, con el grado perfecto de humedad y tueste… realmente increíbles, ya sean con uva o huevo.
La paletilla asada también es cosa fina! Sabor puro y textura perfecta, se nota que llevan años ya en esto!
Otra cosa a destacar son los huevos rotos con madejitas, muy curioso! La alcachofa con jamón y crema de boletus o la borraja con almejas. Todo muy grosero!!!
Hay que destacar además que la reciente reforma realizada ha dejado el local espectacular, conservando todo el carácter tradicional de un mesón asador aragonés de los de toda la vida en Zaragoza pero poniéndolo en el siglo XXI, un gran acierto!