El 22

Un bodegón incrustado en el medio de Palermo Hollywood. Hasta el año pasado no tenían refrigeración y morías de calor pero ahora pusieron aire y es otro cantar.
La carne la dejan bastante rojos, casi que escuchas el mu de las vacas y las ensaladas no son muy originales.

Does have an English menu. Has a sitting fee of 20 pesos per person but at dinner currently 10% off with cash. Meat is on par with other Parilla in that price and layout is nice. But I have had better meat elsewhere.

We enjoyed a nice lunch on the patio after walking around Palermo. We split a red wine and both had meat dishes — his came out on a sizzling plank of wood! Husband is a big steak fiend, I am not, so I enjoyed a meal of pork and potatoes — nice and filling!
There are so many parillas around this area, we picked this place mostly because the patio looked so nice and pleasant, and it was! A nice place to spend the afternoon enjoying meat and wine. We had actually planned to share a variety meat platter but found out a lot of the items on the platter were internal organs, etc., of which neither of us are the biggest fans. So they have some unique offerings too!

Pesima atención, tuvimos que repetir el pedido varias veces, cuando finalmente llega la carne pedida bien cocida llega viva, la ensalada con los ingredientes que se les apetecieron colocar y no los solicitados, en vez de papas fritas puré de papa, todo mal. Una vez que llega carne, que seguía sin cocer lo suficiente, pero a esa altura ya me comía un ternero vivo, comienzo a comer y noto que la carne tiene un sabor horrendo. Sinceramente un lugar para no visitar.

Los dueños de este lugar son los hijos del dueño de la cadena de pizzerias Kentucky. Despues de mucho estudio de gastronomia afuera, especialmente en Manhattan, ellos volvieron a renovar todas las pizzerias dándoles una inyeccion de vida y abrieron esta parrilla con ambientacion de restaurante. El look, muy cuidado, es unico y super estudiado por uno de los hermanos. Logro mezclar un ambiente onda industrial, con un toque light palermiteano y la buena atencion termina de definirlo como una parrilla. La carne es buena, no es la mejor ni la peor. Para los que no comemos achuras, nos hicieron el favor de sacar todas esas porquerias de la parrillada y poner en cambio un mix solo con cortes de carne.
Si detestas La Dorita de Palermo por esa inexplicable espera y fila para entrar, este es tu lugar, es muy amplio y siempre encontras lugar.
Lo genial: no salis con olor a parrilla y estas lista pata seguir la noche.

Esta Parrilla me confunde! Su ambientación es… rara. Hay de todo: un trencito eléctrico que cruza todo el salón por un riel montado en el techo, cuadros, cajones de madera viejos, luces fuertes y paredes amarillas.
Pero, ojo! La atención es de primera. Los mozos son muy simpáticos y atentos. Prestan muchísima atención a las mesas y a los pedidos especiales como «el vacío lo quiero jugoso pero el asado a punto».
Los platos están bien, aunque hasta hace unos 6 meses solían ser más abundantes. Ya no existe la opción de «Parrillada para 2 personas», sino que lo reemplazaron por un «Mix de carnes».
El mix de carnes está bien, pero es solo carne. Si tenes ganas de comer achuras o embutidos, tenes que pedirlos (y pagarlos) aparte. Y eso encarece un montón la salida!
Lo mismo sucede con las ensaladas o las papas fritas, ya no son parte de la parrillada, sino que se piden por separado.
Igualmente, me gusta volver de vez en cuando. Sobre todo, porque te tratan muy bien y no se suele llenar demasiado.