Lo de Rosendo

Vivo cerca de la misma. El lugar está bueno, se llena siempre lo cual denota que tienen ricas cosas porque los precios no son baratos como para que se llene por eso.
La atención es buena de todas las veces que fui (son muchas, más de 20 seguro) fue buena. Te traen lo que pedís en tiempo y forma.
La tortilla me parece de lo mejor para pedir.

Es la parrilla que queda en la esquina de casa, la cual larga un olor espectacular todos los fines de semana y de mi balcón me traslado por los aires hasta sentarme en una de sus mesas de la vereda.
Tiene dos pisos, una terraza y barra para sentarte a comer al paso, la tipica parrilla de barrio.
Ultimamente subieron bastante los precios, el asado al asador es sin dudas la estrella del lugar y las mollejas al verdeo. Ya no voy tan seguido como antes, pero si voy pido eso seguro.
Cuando esperas te dan con la panera unas berenjenas en escabeche muy ricas, en lugar de la tipica manteca.
La atención es buena, no para resaltar, pero lei otras reseñas que los atendieron mal y a mi no me pasó. Los baños son pequeños eso si, casi siempre espero a llegar a casa para ir aprovechando que estoy cerca.
Si pedis a domicilio te mandan los pancitos calientes que son una perdición!

No vuelvo más. La atención es pésima, pero pésima en serio! parece un sketch del cómico Capusotto. Probé el asado al asador, estaba decente… mente recalentado (!), las papas fritas eran claramente congeladas. No lo recomiendo perdida de tiempo y dinero.