Maluva

Pedí con muchas expectativas y eso le jugó en contra.
Me habían hablado maravillas de las empanadas de bondiola y cumplieron, claro, pero no con creces.
Las puse en un pedestal sin conocerlas y las juzgué con la vara equivocada. Habrá que pedir de nuevo, pero más distendido, sin tantas exigencias.

Qué engañoso todo.
Me puse a Unilocalear en un descanso del laburo para ver dónde iba a almorzar en este barrio que desconozco.
A 3 cuadras me aparece Maluva con 7 reseñas y un puntaje casi perfecto, todos hablando de sus «empanadas mágicas».
Todo bien, pero para que una empanada te vuele la cabeza tiene que tener dinamita, o ser muy muy muy rica. No pasó ninguna de las dos cosas y por suerte sobre todo no pasó la primera.
Las empanadas están bien, sin embargo ya están hechas y expuestas en la vidriera, te las recalientan en el horno y atroden. El precio para ser empanadas ya hechas tal vez sea un poco elevado, pero hay algunas promos que valen la pena.
El punto a favor tal vez sea la innovación en las empanadas de bondiola de cerdo, pero en cuanto al resto: Un local chiquitisimo, en el que hace un calor terrible, no tiene una limpieza impecable y las benditas empanadas ya están hechas de antemano, vaya a saber uno desde cuando.
NO SOS 5 ESTRELLAS MALUVA.

Llame a Maluva por la recomendación de Unilocal.Pedimos empanadas únicamente, tambien por recomendación de las reseñas. El pedido llegó en 20 minutos, y por un precio accesible comimos unas empanadas muy ricas! Recomiendo la de bondiola de cerdo.

Me paso la clásica. Leo todos los reviews 5 estrellas, esperó comerme una empanada que me cambie la vida y resulta ser una más del montón. Son ricas, tamaño mediano, y las de bondiola son una innovación interesante. Un buen delivery para pedir.

Bueno, acá la oveja negra de Unilocal bajándole el puntaje perfecto a Maluva.
Creo que mi gran error fue pedir ilusionada, esperaba por lo que leí tener una experiencia casi religiosa con estas empanadas. No estuvieron mal, no, pero bueno, tampoco es que me cambiaron la vida.
Para empezar, por más ricas que puedan ser, son empanadas recalentadas. Ya las tienen hechas (capaz del día anterior) y una empanada recalentada jamas va a poder competir con una recién hecha.
Están hechas con tapas grandes pero con poco relleno, entonces me parecieron caras.
Me llegaron volando, vivo a 5 cuadras pero igual, era domingo a la noche y llegaron antes de los 20′.
Hay un detalle mágico y es que hay empanadas de BONDIOLA de cerdo. Dormí, no lo supe, no las pedí. Pero qué mente iluminada hay que tener y qué bueno que en este mundo exista gente así. La próxima las pido.
Conclusión: empanadas normalitas, nada del otro mundo, tirando a caras, pero correctas y para pedir cuando hay hambre urgente porque llegan rápido.

BUENÍSIMAS empanadas.
Me alimento los dos años que vivi en La cuadra y es lo único que realmente extraño del barrio.
Maluva es un local chiquito con empanadas en la vidriera, una tele y una barra. Acá no hay decoración, un menú largo ni camareros. Este local chiquito sobre Sánchez de Bustamante es el cielo de las empanadas. Tienen variedad, pero tampoco es que haya cosas locas. Atún, pollo, carne, humita, verdura, jyq, con anana, de cerdo y no mucho mas. No tengo idea de que es lo que hace la diferencia, pero son geniales. Ya están hechas, te las calientan y te las llevas. También hacen delivery.
En el local hay una barra para comer al paso si quieres comer ahí. Siempre tienen diarios del día.
Tienen pizza, fugazzeta rellena y faina, pero acá se comen empanadas. No es que la pizza esta mal, pero no es buena. La fugazzeta esta mejor.
Los chicos que atienden son un amor y súper eficientes.
No son baratas. Cada empanada sale 14 pesos, aunque en la docena salen menos. De todas formas, lo valen por calidad, sabor y tamaño.

Este local de apariencia casi insignificante tiene unas empanadas que son simplemente maravillosas, fantasticas, una explosión de sabores en la boca o cuanto piropo gastronómico e hiperlativo se les ocurra.
Mi perdición son las de roquefort.
Las pizzas son buenas pero son simplemente pizzas y no te deslumbran pero las empanadas OH MI DIOS, para llamar una y otra vez.

Si estás peligrosamente bajo de peso, te recomiendo pasar con urgencia por este local. No pierdas tiempo con las pizzas, son correctas pero no te desnucan. La fugazzeta rellena va mejor. Pero mirá las empanadas que se exhiben desde la vidriera. Esa es la posta. Carne cortada a cuchillo, verdura y salsa blanca, ananá con jamón. EXCELENTE diría el señor Burns.
Si te va, aprovechá la promo de 6 empanadas con una gaseosa de 600 y comé el barra del costado. Una receta increíble para subir kilos. Imposible no repetir.

Maluva es un local chiquito, oscurito y con uno de los mejores secretos de Buenos Aires. Tienen algunas de las mejores empanadas de la historia. Mis preferidas las de verdura y salsa blanca. No las podés creer. Las de atún, igual. Si tenés suerte de encontarlas, porque salen tanto que a veces tenés que esperar a que vuelvan a preparar.
Si pasás por enfrente, casi seguro que no lo notás. Pero la calidad de su comida hace que el viaje para conseguirla valga la pena. Es un típico lugar de paso y de delivery, aunque en este último caso por la gran demanda puede tardar hasta una hora y pico en llegar con tu pedido.
Para los que vayan por la zona, no lo dejen pasar. También hay pizzas muy ricas pero dentro de la norma de todas las de Buenos Aires, pizzetas si vas solo, y alguna que otra comida más elaborada. Pero las estrellas indiscutidas son las empanadas. No hay manera de describir lo buenas que son.
Eso si, andá preparado para hibernar, porque después de almorzar ahí la sensación de llenitud es tan grande que vas a dormir la siesta más larga de tu vida.