Según dicen, María Dulce empezó vendiendo tortas a familiares y vecinos hasta que empezó a tener éxito y se puso un mini-local en una de las principales calles del barrio. Hoy María Dulce es una pastelería con todas las letras. Es el Muma’s Cupcakes del barrio. Tienen un nuevo local –enfrente del anterior– que está perfectamente puesto. La decoración, los cuadros, las sillas, todo estilo vintage cuidado hasta el mas mínimo detalle. Pero hablemos de lo que importa… LASTORTAS. María Dulce logró algo único, pastelería de autor con postres que son tan exquisitos como perfectos estéticamente hablando. Todos y cada uno de los productos está elaborado hiper-artesanalmente. Lo bueno es que cada torta, cupcake y postre es unico. Acá no existe«dame dos de…» sólo hay una para llevar. Cada vez que hay cumpleaños, María Dulce. También hay cookies, tortas individuales y masas para los antojos cotidianos. Nada puede ser malo de un lugar tan bueno. Da gusto comprar así! PD: la atención es buenísima. La última vez que fui nos regalaron velita y hasta una paleta de chocolate. Genial.