Nesta Reggae Bar

Amo este bar. Buena onda, pizas y sandwiches ricos, variedad de cervezas y un clima informal que invita a sentarse a tomar una cerveza fria cuslquier dia de la semana.
Los precios son muy baratos. Recomiendo ir cuando hace mas cslor ya q llenan la vereda de mesitas. Me encanta este lugar ! Para ir con amigos o en pareja … No falla! Ideal para cortar la semana

Muy lindo lugar y onda. Comimos unas hamburguesas caseras que son un espectáculo. Grandes, bien condimentadas. Vienen acompañadas con papas. Todo genial!

Un lugar muy buena onda con precios económicos. Gran variedad en la carta y una atención espectacular. Las salchichas de Viena con camisita y salsa de cheddar don excelentes.
El sándwich «Ziggy» de lomo ahumado con rúcula y parmesano es una genialidad. Sabroso y liviano. Muy buena experiencia, totalmente recomendable.

Muy lindo ambiente y riquisimo todo. Buenos tragos, los sandwichs súper recomendables.

This place is the comfortable middle distance rasta bar of BUE, cheap and good, nice and chill. Relaxed clients with non hysterical behaviour. Absence of hipsters. Everything just flows well.
Epicentro de Caballito residencial. Zona de edificios plagados de delivery de pizza pero de pocos restobarespizzerias. Pizza y cerveza. Simple tiene que ser.
Este es uno de esos lugares!
Y con la mejor onda, música amable para el oído, el mejor precio, la hermosa Honorio Pueyrredón para veredear.
Hace que digamos: y si en vez de pedir pizza, vamos a nesta? Sin que te afanen con los precios, sin que tengas que prepararte para salir, sin tener a todos mirándote a ver cómo estás, sin soportar a estirados, sin soportar gritos machotes ni histerias colectivas.
El trato justo.
Me olvidaba: la pizza buenísima, la variedad de cerveza apta para todo gusto.

Me gustó mucho este lugar! Tal como dice su nombre, esta ambientado con onda reggae, con cuadros de Bob Marley y dibujos sobre las paredes. Tienen muchas mesas, bastante pegadas entre si, lo que lo hace ruidoso y caluroso. La atención es muy buena, amable y con onda.
El menú ofrece muchas muchas variantes de pizzas y sándwiches. Hay cosas comunes, otras mas originales, y también opciones (varias) vegetarianas y veganas.
Las pizzas son muy buenas. Las hay individuales, las cuales son bien abundantes. En cuanto a los sandwiches, yo probé uno con milanesitas de calabazas y otras cosas y estaba muy bueno. Lo único que yo le cambiaría es el pan, ya que me pareció medio insulso. Son bien abundantes, también.
En el menú podes encontrar opciones de picadas (también hay dos opciones de picadas veggie). Se veían realmente buenas, nos quedaron pendientes.
Hay ricas entradas! Y para todos los gustos! Recomiendo que se pidan las que mas les guste mientras esperan el resto de la comida. Ojo, las entradas llegan y los platos te los sirven un ratito después por mas que aun no la hayas terminado.
Los precios me parecieron acordes. Dos personas compartiendo una entrada, dos platos y dos bebidas diferentes: $ 250.

El lugar es pequeño pero muy lindo, en noches de calor es necesario quedarse afuera
tiene variedad en comidas y bebidas
La atención es muy buena y nunca demoran con los pedidos

Nesta tiene el aura jipi buena onda que caracteriza a cualquier bar reggae. Lejos de ser sólo un lugar para tomar algo escuchando a Marley, la comida es muy rica: pedimos una especie de tapeo como para picar y estaba todo genial. Los sandwichs tienen muy buena pinta y las pizzas estallan. Plus: la birra es barata y hay de litro, como buen bar de barrio. La atención es correcta y tiene mesas en su ancha vereda, ideal para climas primaverales y estivales.
Ya lo adoptamos para cuando no hay ganas de ir a Palermo ;)

Entre mis amigos hacemos el chiste de que solo salgo de mi zona de confort (Palermo y zonas aledañas) una vez al mes. Este viernes fue esa vez, estaba con hambre por Caballito y fui a Nesta.
Tienen una carta muy amplia, tanto que me costó mucho decidir entre tantas opciones de pizzas, picadas y lo que para mi es la estrella del lugar: los Sandwiches.
Me alegró tener tan amplia variedad ya que en Buenos Aires no hay tanta pasión por los sandwiches, más allá de lo tradicional. Además tienen muchísimas opciones vegetarianas y veganas, una más tentadora que la otra. También hay variedad de cervezas y tragos.
El lugar es bien ruidoso, casi ni se podía conversar, las mesas están muy pegadas y no es un lugar muy lindo como tal, pero la atención es muy amable y la comida rica. Es para comer rico, rápido y a buen precio. Si estuvieran en mi zona de confort volvería pronto.

Fui a cenar temprano un viernes. No estaba tan lleno pero dsp se ocuparon todas las mesas. El ambiente y decorado me gusto mucho, obviamente sonando música reggae que va muy bien. Había parejas, grupos de amigas y hasta señoras y familias. La limonada que muchos recomiendan es riquísima y refrescante. La comida llego rápido, caliente. Muy buenos sabores. En cuanto al precio, me pareció justo. Me quedaron muchas cosas por probar así que seguro volveré. RECOMIENDO :)

Vivo a 2 cuadras. La verdad es que nunca me había llamado la atención en lugar, pero ayer decidimos entrar y sorprendió positivamente. Es bar-​resto. Tiene MUCHAS opciones veganas y vegetarianas. La limonada 10 puntos, además hay muchos licuados frescos y cervezas y tragos. Comimos las papas Roosticas a la provenzal c salsa de ajo (muy buenas) y una picada vegana (que figura como «mini» y es bastante generosa).
Los precios están lejos de los lugares palermitanos, así que eso suma mucho!
El fuerte del lugar es, si el clima acompaña, sentarse en una mesa en la calle, ya que adentro hay un poco de encierro.
Pienso volver a probar otras picadas (hay muchas) y los veggie-​sándwiches.
Excelente lugar, lo recomiendo a full!!!

Las papas rústicas en cualquiera de sus variantes y las picadas que ofrecen son todas para recomendar.
Todo muy rico, linda presentación y buena mercadería, a pesar de ser un bar informal.
Siempre hay mucha gente, y no es para menos: buenos precios, re buena onda de parte de todos los que laburan y atienden ahi, y comida de primera.
Para volver cuantas veces se pueda.

Antes de entrar no le daba mucho crédito. Hacía mucho frío y los vidrios estaban todos empañados. Desde afuera sólo se veía que estaba lleno de gente.
Luego de acostumbrarse a la sobredosis de Bob Marley y, más precisamente cuando te llegan los platos, decís: ahhh bueno, esto, como Aladdin, es más de lo que parecía.
Pedimos las entradas nomás. Unas papas «rootsticas» con salsa de ajo, unos quesos envueltos en berenjena, rúcula y queso, y otros quesos con zuchinni. $ 55, $ 65 y $ 70 me parece que eran los precios. Cinco pesos más o menos.
De tomar pedimos una jarra de limonada ($ 50).
La limonada está rica, pero vino muy congelada, con bloques de hielo que no eran muy agradables.
Ahora, la comida fue mucho más abundante de lo que esperábamos. Esa es la primer sorpresa, pero luego probás y todo está muy rico.
Pasó de parecer un barcito al paso a una muy buena opción para comer muy bien a un precio accesible.
Además. Sí sos vegetariano hay muchas opciones.
El problema es quizás el ruido y lo lleno que puede estar, pero eso no es culpa de ellos. El ruido es más que nada de conversaciones. La música está a un buen nivel.
Edit: olvidé decir que, al parecer, todo es casero (pan, pizza, condimentos, etc)

Como me gusta Nesta!!!
En una zona que no se destaca por su oferta, este bar la rompe.
Ambiente hiper relajado, muy buena atención.
En la carta encontras picadas, pizzas y muchísimos sandwichs en pan casero, grandotes y riquísimos. Hay variedades vegetarianas.
Muy ricos tragos, la caipiriña y el mojito son muy ricos y no escatiman la lima ni la menta.
Tienen mesas afueras, y al no ser una zona de gran movimiento, el tráfico y la gente que pasa casi que no molestan.
Para no esperar, vayan cerca de las 21 o después de las 00 hrs, ya que temprano hay familias comiendo codo a codo con los más jóvenes.
Si están por la zona vayan, no se van a arrepentir.

Empezo siendo un bar hippie para ir a tomar algo, tranqui, muy tranqui. Y de repente cambiaron la carta y fue una bomba. Todo de estilo vegetariano, aunque tienen cosas con carne, la comida es buenisima.
Las picadas son muy abundantes: fiambres, berenjenas al escabeche, porotos condimentados, morrones asados, aceitunas, mayonesa de zanahoria, tomates secos confitados, pasta de garbanzo, etc. y todo con pan casero recien hecho.
Tienen una gran variedad de sandwiches, divididos en grupos de acuerdo a su ingrediente principal: de jamon crudo, de milanesa de berenjena, de peceto, de lomito, de atun, de queso, de milanesa de calabaza, veganos, etc. Los que probe, me encantaron. Son grandes y el pan tambien es casero.
Ademas tienen pizzas de un monton de sabores, muuy ricas y entradas.
Todo es muy recomendable, infaltable la limonada hecha en el momento.
Los precios son muy baratos, el lugar muy relajado, tiene mesas para comer afuera. No tiene delivery pero se puede pedir para llevar.

Es lo mejor para ir con amigos a comer y tomar algo. Tiene esa cosa de estar medio oculto en el barrio, en una zona más residencial, probablemente el que no conoce pase de largo tranquilamente. Tiene un ambiente suuuuuper relajado pero cumple absolutamente.
En mi caso ya fui un montón de veces, en la carta encontrás picadas, pizzas (con algunas opciones vegetarianas) y mil opciones de sándwichs uno mas tentador que el otro. A mi gusto siempre todo muy rico y se notaba que era hecho en el momento. Otra ventaja es que casi no te hacen esperar. Y lo super recontra destacable, los tragos. Ni ahí esperes un trago hecho así nomas con juguito. Por el lado del sin alcohol hacen una limonada muuuuuy rica. No soy muy amante del daiquiri, mis amigas si, lo aman. Hoy tome un mojito que estaba increíble, con mucha menta, bien rico. Lo super recomiendo para ir a pasar una linda noche. Eso sí, no es super grande y generalmente los fines de semana se llena, es super lindo ahora en verano para comer afuera que ponen mesitas. Si caen después de las 22.30 a comer seguro tengan que esperar un poco.

La carta comienza diciendo que son un grupo de amigos que pusieron un bar al que les gustaría ir. Ese es el concepto. Comida casera, atención amigable, precios razonables. Muy bueno.

El Nesta, como lo llamamos en el barrio, hace un homenaje con su nombre a Robert Nesta Marley, más conocido como Bob. Surgió como un bar reggae pero desde que mejoraron su carta de comidas, el lugar levantó muchísimo.
El local está ambientado con murales y cuadros que hacen referencia a la música jamaiquina. Tiene una pantalla gigante en la que pasan vídeos y recitales, de reggae y ska, obviamente. El sonido es adecuado y permite hablar. Los nombres de los sándwiches y ensaladas también hacen honor a la cultura rastafari.
Hay picadas, sándwiches (fríos y calientes), pizzas, ensaladas, algunos platos elaborados y postres. Casi todo tiene opciones vegetarianas e incluso veganas. Los sándwiches son enormes y vienen en pan casero. Las picadas también son suculentas, para dos persona. La Kaya, que es vegetariana, viene con dos tipos de quesos, milanesitas de zapallo, berenjenas en escabeche, tomates confitados, aceitunas, una mayonesa vegetal (deliciosas) y pan casero. Si son de buen comer, le podés agregar unas papas rústicas a la provenzal o con salsa de ajo. No tienen nada frito.
Para beber hay variedad de cervezas de litro y en porrón, algunos tragos clásicos, jugos, limonada, gaseosas y agua. La jarra de limonada con jengibre es exquisita, te la hacen en el momento y es súper refrescante.
La cocina está a la vista y en la barra siempre vas a encontrar al dueño, que antes ostentaba unos dreadlocks hasta la cintura aunque ahora se los cortó. La atención es muy buena.
Sin duda, es una gran opción en un lugar del barrio que no hay mucha abundancia de bares y restós copados. Recomendable.