Open Gallo

Lo bueno es que hay muchas canchas. Hay tres de 4 de cinco que estan nuevas pero las dos más grandes u y una de las de cinco están destruidas. Hay que tener suerte. Si no hay nadie después de tu turno te suelen dejar jugar muuuuuucho. El barcito está bueno y hay lugar para guardar los autos.

Varias canchas, eso le da gran disponibilidad pero también tiene mucha concurrencia. Generalmente están en buen estado, pto a favor. Hay varias superficies y medidas, lo que le da una gran versatilidad, no es barato pero tampoco muy caro.
Es un lugar muy amplio con buenos vestuarios, algo que me parece clave siempre, una gran confitería al frente y COCHERA techada/​descubierta. Aclaración para esto, generalmente hasta las manos y a ciertos horarios hay cola para entrar ya que hay una sola salida/​entrada y mucho tráfico en la cuadra, pero bueno, todo no se puede.
Se puede reservar vía telefónica, también cuenta con gimnasio y otro montón de actividades pero no me puedo aventurar mucho en esos puntos por desconocimiento.
Reseña cortita y al pie, porque bueno… es una cancha de fútbol.

Dos cosas fundamentales en una cancha de fútbol 5 o 6. Primero la calidad del pasto sintético, que tenga poca arena, preferentemente caucho y dimensiones normales. En este aspecto no la recomiendo.
El segundo aspecto es la disponibilidad y que cuando no tenes un abono fijo en un horario puedas conseguir la mayoría de los días y en cualquier horario. En este aspecto open es una buena alternativa en palermo para conseguir cuando armas un partido sobre la hora.
Tiene vestuarios para cambiarte y un bar para poder comprar y/​o comer algo. El precio es acorde a la calidad, y mas bajo que en las canchas de primera linea.
Tenerla en cuenta solo por disponibilidad. A diferencia de otras si no hay turno ocupado después podes jugar un rato mas.

Fuimos con mi grupo de amigos que jugamos al futbol en Salguero Futbol (a 3 cuadras) porque no conseguimos cancha para un desafío especial de sábado. El lugar está bueno, es un complejo grande, pero la cancha más o menos. El sintético no era parejo, tenía unos parches con desniveles. La cancha y los arcos estaban muy justos de dimensiones para jugar cinco contra cinco.
Pasó que nos faltó uno y en Open Gallo a veces los fines de semana van flacos que no tienen nada que hacer a ver justamente si no falta uno para jugar. Esto en la cancha de Salguero no pasa muy seguido, así que lo podemos considerar un servicio más del lugar.
Los vestuarios están bien, hay lugar suficiente a pesar de ser mucha la gente que usa las instalaciones.
Los precios son normales, pero para mí son mejores las canchas de Salguero Futbol.

«El Open», como le decimos los habitués, es una mezcla de muchos tipos de personas: aficionados al fútbol, a la danza y a los fierros, todos tienen en común que usan el cuerpo de alguna manera. Open Gallo era una fábrica que se vendió y devino un gran predio con canchas de fútbol al aire libre, estacionamiento, vestuarios, salas de musculación y un salón enorme para danza. De estas instalaciones, yo sólo uso el salón que es precioso, tiene los pisos de madera y es súper largo, por lo que hay mucho espacio para bailar. No sé por qué ni cómo empezó, pero el Open quedó muy asociado a la danza contemporánea y grandes bailarines y profesores dan clases allí. Los costos de las clases son parecidos a los de otros institutos. Hasta ahora tomé clases con Emanuel Ludueña y Ana Garat, dos bailarines de flying low que son maravillosos!