Los domingos está abierto hasta las 22 pero un ratito antes te «empiezan a hechar» cuando entran a limpiar la pista de patinaje. Los baños muy sucios en los cubículos pero es entendible por la cantidad de gente que frecuenta el lugar. La cocina cierra temprano asi que si pensas quedarte a comer algo, mejor anda buscando un barcito cerca!
Tatiana M.
Rating des Ortes: 4 Buenos Aires, Argentina
PolarCity es la pista de hielo más grande de Buenos Aires. Está en muy buen estado tanto la pista como toda la instalación. Tiene dos pisos, en el de abajo tiene un bar enorme con comidas muy ricas y varias promos, además de mucha capacidad. En el piso de arriba hay más espacio para sentarse y un ventanal gigante en donde se puede ver toda la pista desde arriba. Un detalle que me encanta es que alrededor de la pista hay un pasillo en cada lado, espacio que personalmente uso para correr y entrar en calor antes de patinar. En dónde también los padres que no se animan a entrar a pista pueden estar para ver a sus hijos patinar. Yo voy dos o tres veces por semana para practicar y entrenar mi patinaje. Es la pista ideal para tener suficiente espacio para hacer saltos y trompos. Para los que les interesa, hacen cumpleaños para los chicos y por lo que tengo entendido, a un muy buen precio. Lo único en contra que tiene son los patines que entregan, no todos están en muy buen estado ya que son bastante viejos.
Lucía F.
Rating des Ortes: 4 Buenos Aires, Argentina
De todas las pistas de hielo de Buenos Aires, Polarcity es mi preferida. No tanto por la ubicación, sino por el estado(es de las más nuevas) y sobretodo por el tamaño. Supera a sus competidoras. El bar, con una estética algo colorida y ochentosa/noventosa, aloja a los grupos de chicos festejando cumpleaños durante la tarde, o a los padres que miran a sus hijos tomar las clases o simplemente patinar por recreación. Para los que no se animan a ir porque piensan que se van a caer al primer contacto con el hielo: hay clases para principiantes de lunes a jueves por la noche. Yo tomé clases siempre con Angélica Ovadía, una señora que se calza los patines y tiene entre sus alumnos a chicos y chicas de todas las edades, algunos no cazan una y otros son más avanzados, pero lo importante es que todos comparten la pista y ella sabe dividirla de forma que no se mezclen(por eso es que me gusta Polarcity: es más fácil distribuir el espacio) Pueden ir un día y pedir la clase de prueba, lo único que van a pagar es la hora de pista y el alquiler de patines. Para mi es un plan re divertido para el invierno: la pista está en mejores condiciones y después pueden pedirse unas pizzas o tomar un café para recuperarse del frío. Consejo: ¡llévense guantes de lana!