Samsung Studio

Yo caí de pura casualidad al Samsung Studio porque gané entradas para reci. El lugar es chico, muy chico lo cual resulta lindo si la banda es demasiado nueva y hay poco publico o tambien sirve mucho para acústicos o shows íntimos muy íntimos de bandas.
Creo que la gente que sufre de claustrofobia en este sitio, lleno lo va a pasar mal. Es un sitio lindo por fuera y por dentro, la arquitectura del sitio es lo mejor que tiene.
El sonido no es el mejor del mundo, puede que le juege en contra el tema ladrillos o que se yo, no soy experta pero el tema de la acustica no es lindo en este sitio.

Fui hace un tiempo a Samsung Studio a un par de eventos de prensa donde también se cantó.
El lugar en si me gusto mucho. Tenía toda la onda aunque es un poco chico pero ideal para los eventos a los que fui.
El escenario si bien un poco chico me pareció muy lindo. La comida que sirvieron era muy rica. Pizzas, empanadas, todo bueno más gaseosa y vino para los que tomaban.
La atención también fue muy buena.

Pre-​cio-​so. Qué sitio más hermoso para ver un recital, la estructura es preciosa, las paredes en ladrillo imitando un castillo le dan un toque único y diferente. El piso de madera y el escenario a nivel de los espectadores lo hacen ideal para apreciar bien el espectáculo, de una forma íntima y cercana. Aunque da la impresión de ser chico, es bastante cómodo y hay mesas a lado y lado para quienes no quieran permanecer de pie. Los precios son un poco altos, pero no impagables. Y aquí lo importante, la acústica, es muy buena y se escucha todo con claridad y nitidez. Está bien señalizado e iluminado, la salida es amplia así que no hay necesidad de empujar para salir rápido. Lindo, lindo lugar!

Es lindo, muy muy lindo. Es perfecto para una primera salida o para ir a escuchar una banda de manera íntima, en un espacio reducido donde seguramente vas a poder estar luego con los músicos.
Funciona dentro del Espacio M, un lugar con una espectacular barra que se alquila para eventos. Está muy bien puesto, prolijo, siempre impecable y com excelente atención de hosts y acomodadores que te guían a tu asiento con muchísima simpatía.
La propuesta es poder ver un show mientras se come /​se toma algo, pero realmente en esta parte hacen mucha agua: la comida es bastante regular, las bebidas siempre están calientes y la atención demora una eternidad. Por otro lado, la acústica es horrible.
Muy lindo para fotos, para conferencias, para encuentros breves, pero evitaría ir a ver bandas quilomberas o pedir algo para comer o tomar.

Fui al samsung studio de pura casualidad, resulta que era viernes, no tenia nada para hacer y me llego un sorpresivo mensaje que me regalaban dos entradas para ir a ver Tan bionica (si, los banco a las piñas) asi que gracias a claro y samsung iba a disfrutar de un show intimo.
Abrieron la puerta una hora antes, y nos obligaban a dejar todo bolso o cartera en un guardaropas gratuito del lugar (cosa que no fue muy de mi agrado) .Nos convidaron con gaseosa, soda y agua, lamentablemente si querias comprar otra cosa no podias porque la barra estaba cerrada.
En lo que respecta al show el sonido estuvo bueno, pero no termine de buscar un punto para verlo cómodamente (eso que no había ni 200 personas y sobrava lugar). las pantallas de led fueron un desacierto porque todas las imágenes aparecían pixeladas, desconozco si es porque al estar muy cerca produce ese efecto.
La arquitectura me encanto, la onda del lugar promete pero queda a medio camino, le falta encontrarse. Los baños del lugar son bastantes chicos, e incómodos.
El show estubo bueno, pero no creo volver a ir a ver la banda, el publico es detestable, muy. Prefiero ver el poster que me regalaron a la salida!

Leí las reseñas anteriores y, como ví que no había unanimidad, pongo mi reseña para desempatar (?).
Fui a la presentación del disco de una banda 100% de rock. La acústica me pareció increíble. La disposición en mesas, muy adecuada e íntima, haciéndolo un muy buen lugar para ir con amigos o en plan cita.
Tenían un solo camarero y por ese motivo, después de 20 minutos de esperar, tuve que acercarme directo a la barra a pedir.
En un lugar de esta categoría, me sorprendió notar la pobre variedad de cervezas, Quilmes y Stella Artois, y que solo tuvieran empanadas como opción para comer algo (las de carne eran muy ricas).
Por la iluminación me fue imposible sacar una foto decente de la carta y por eso motivo les pongo acá algunos precios:
Tragos clásicos $ 55.-
Tragos especiales $ 70.-
Cervezas entre $ 30 y $ 45.-
Copa Vino Tinto $ 40.-
Vinos desde $ 100 hasta $ 380.-
Copa de espumante $ 50.-
Whiskies entre $ 65 y $ 100.-
Gaseosas $ 25.-
Empanadas $ 15.-

Fui una sola vez al Samsung Studio y no se si será el mejor o tan solo un buen lugar para ir a presenciar un recital, pero en este sitio cumplí uno de los sueños de mi vida: Ver al genial Robyn Hitchcock en vivo, por lo que esta reseña es un tanto objetiva, pero mucho más pasional debido a lo que significó este lugar en tal día de mi vida.
El lugar es bastante amplio y al menos en ese día que tuve la oportunidad de ir eran todas mesas, onda ver un super show de lo más cómodo. Si se quiere hay un pequeño menú para pedir algo de beber, aunque los precios son bastante caros y no es del todo lo más adecuado. Pero en fin, el espacio en sí está bastante copado, tiene una muy buena acústica y, depende el show en cuestión, es un espacio genial para pasar una noche inolvidable, por suerte esa fue mi experiencia.

Hay lugares de la ciudad que siempre me van a generar una serie de dudas sin resolver. Samsung Studio es uno de ellos. Un lugar para ver shows en vivo que se presentó como un punto único a nivel de calidad en sonido y visualización. El resultado fue un primer piso con pésima acústica y un escenario extraño que no se ve bien inclusive estando de frente. Muy extraño.
Pero lo que más me llama la atención de este lugar es que casi ni funciona. Si revisás su calendario vas a encontrar que, como mucho, hay dos shows por mes cuando una sala de conciertos regular alberga cinco por semana. ¿Por qué tan poca programación?; ¿Qué hacen con tanto tiempo libre?
De todas maneras rescato lo bueno, puertas adentro de este local vi a Girls, Les Mentettes Orchestra, Dan Deacon y otros shows que recuerdo con mucha alegría.

Samsung Studio me extraña un poco. Por qué una marca que vende equipos de sonido y electrónicos le pone nombre a un escenario y no acustiza bien el lugar? Cuando salís te duele la cabeza, la reverberancia es tremenda. Quizás el problema es el techo muy bajito, quizás que todo sea de ladrillo, el caso es que le hace falta un ingeniero de sonido que determine cómo hacer para que funcione mejor.
Dicho esto, el espacio tiene algunas cosas a favor. Una mini barra con tragos, buen piso de madera, un escenario bastante amplio para el lugar. También traen a alguna que otra banda de afuera que es imposible ver de tan cerca en otras circunstancias.
No es la mejor de las salas, pero a veces para escuchar la música que nos gusta no tenemos tantas opciones de donde elegir.

Ubicado en pleno San Telmo, Samsung Studio es el lugar perfecto para ver un recital íntimo. Al escenario se accede por una escalera hasta un primer piso. Las paredes son todas de ladrillo a la vista.
Fui en 3 oportunidades en las 3 la ambientación del lugar era distinta. Para Yann Tiersen había butacas distribuidas como en un teatro, cuando fui a ver a Benjamin Biolay había mesitas para tomar algo mientras veías el show y para ver a Taura Rock podías estar parado en cualquier lugar.
De todos lados se ve perfecto y además tiene una barra que está abierta durante los shows, donde podés tomar una cerveza o gaseosa y comer algo, depende como esté ambientado.