The Temple Bar

A una cuadra de Plaza Armenia, esta sucursal de Temple Bar es otra de las mejores. Amplio espacio y bien ambientado, con lugar para sentarse tanto dentro como afuera en el patio. Buena variedad de cervezas, entre las que se destacan especialmente la Cream Stout y la Honey, y buena variedad de comida. Por lejos el mejor plato del lugar son las papas Temple, que vienen con panceta, cebolla de verdeo y mucho queso arriba. Todos los sandwiches vienen acompañados con una mayonesa de ajo que es muy muy rica. Vale destacar también las tres variedades de cazuelas, en especial el lomo a las tres pimientas.
El tema del espacio en general es un problema, sobre todo jueves, viernes y sábados. En estos días es casi imposible entrar sin reserva después de las 9:30 P.M. y debido a la cantidad de gente que suele juntarse, el servicio es bastante lento y puede llegar a tardar más de la cuenta, sobre todo la parte de la cocina. Así y todo, la gran disponibilidad de espacio hace que sea una buena opción para ir con grupos de amigos grandes o con compañeros de trabajo en plan de ‘after office’, ya que en estos tres días suelen abrir más temprano.
Respecto a los precios, si bien aumentaron bastante en el último tiempo, todavía se siguen manteniendo dentro de lo razonable. Con Club La Nación es posible mantener el precio de las cervezas en el horario de Happy Hour, que suelen ser 2 por un monto fijo.

Muy buen lugar para ir con amigos… Buena cerveza y la comida es normal, un muy buen after o previa!

Es un lindo lugar, buena música y gente copada pero la atención deja mucho que desear, sobre todo si te sitúas en el patio.

Nunca había ido a este bar aunque sí había oído hablar mucho de él. Un amigo festejó el cumpleaños ahí, y finalmente pude conocerlo. El ambiente me gustó mucho, relajado y, sobre todo e importante, me llamó la atención la buena música! The Strokes, The Smiths, The Killers, Kaiser Chiefs, Franz Ferdinand, etc. Me hicieron sacar una sonrisa y un «Uh que buen tema!» cada 2 minutos. En fin, durante el cumpleaños estuvimos en el patio trasero, que es bastante grande, y habían reservado los cumpleañeros para 100 personas. Dato: No te cobran por reservar, siempre y cuando compres algunos tragos/​birras/​comida para los invitados por adelantado. Me pareció buena onda eso, además de esa forma, si llegás temprano te invitan algo de comar y/​o comer: p. El patio está muy bien ambientado y con iluminación y decoración acogedoras. Hacía algo de frío cuando estuve, pero puedo imaginar que en verano debe ser una bomba parar ahí a tomar algo.
La cerveza tirada me pareció muy buena, probé la negra y la rubia y, aunque me gustó más la primera (como siempre) las dos más que aprobadas. También probé la pizza, que era pasable aunque nada del otro mundo como suelen ser las pizzas de los bares. Los precios los ojeé y me pareció algo caro, aunque tal vez yo estoy desactualizada.
En fin, espero tener la oportunidad de ir de nuevo pronto.

La verdad es que frecuente Temple en muy pocas ocasiones y en ninguna de ellas me fui satisfecha con el lugar.
La atención es muy amable, pero ni la cerveza ni la comida se destaca.
Las jarras de quilmes que ofrecen suelen estar a temperatura casi ambiente y las cervezas propias de el lugar no son las mejores para mi gusto.

Gracias por tanto, The Temple, y perdón por tan poco.
El sábado fuimos a un cumpleaños y arrancamos tranqui, con una hamburguesa Temple Bacon (muy rica, abundante y con papas), y una jarra de Temple Barley Wine que estaba MUY buena, quizás demasiado buena. De hecho, todo estaba muy bueno y abundante, especialmente las porciones de papas fritas (no pudimos terminarlas).
Los tragos eran muy ricos, que yo recuerde (la noche fue bastante borrosa) probamos el Jägermeister con Red Bull, Cuba libre (me pareció que estaba preparado con Pepsi, ojo, aunque tiene sentido), más cervezas de todo tipo…
Los precios son muy adecuados teniendo en cuenta la calidad y el tamaño de las porciones, tanto en comida como en tragos. Además, el ambiente es muy bueno y tienen Happy Hour (aunque no significa 2×1 sino una reducción de los precios).
100% recomendado para salir con amigos a comer y tomar rico en un ambiente genial.

El ambiente es todo. La variedad de cerveza es buena. Las papas son un clásico de mi vida.
Excelente para grupos. Los dueños se preocupan por sus clientes. San patricio te un festejo hermoso, como cliente habitué se encargaron de que tenga lugar en el temple bus.
Hace años festejo mi cumpleaños acá y lo voy a seguir haciendo.

Yo sè que todos aman este bar. Es el bar de moda en todas sus versiones y lugares.
Pero realmente para mí hay muchos mejores. Temple siempre esta repleto, a tope en serio. La atenciòn es lenta y no se puede ni caminar… de las cervezas no se puede decir nada, son todas buenas.
Si vas en grupo y no reservaste y si o si querés parar ahí … bueno armate de paciencia porque podés amanecer hasta que alguien decide irse.

Fui el domingo por la noche, a eso de las doce de la noche. Estaba tranqui, pero bastante gente para ser un domingo. Nos limpiaron la mesa y la moza fue muy amable. Pedimos solo dos tragos. la jaggerinha y irish bomb. Recomendadisimos me encantaron. La cerveza negra artesanal me parecio muy rica y estaba a la temperatura justa. Los dos tragos nos costaron 220 pesos, y la verdad que la relacion precio-​calidad me parecio muy bien.
El unico detalle es que los baños estaban un poco sucios. Tal vez era por el horario, asique mucho no lo juzgo. Lo recomiendo al lugar.

Temple Bar es un típico bar irlandés, con buena cerveza. Buenisima.
Esta es la opción de palermo, bien palermitana. Con un lindo patio. Pero perdió el alma de los otros bares de la típica cadena, sumado a que está orientado a otro tipo de público.
Prefiero mil veces las sucursales del centro o Las Heras.
Ahhh, el baño es una mugre, siempre.

Temple es de esos lugares que no te vuelan la cabeza, pero siempre vas a querer volver. Un ambiente ameno, y el punto fuerte es el patio trasero, muy bien ambientado, ideal para las noches de verano. Si vas con amigos y querés estar cómodo, hay que reservar con tiempo o ir bien temprano porque se llena.
La música es muy buena, pero para mi gusto, es mejor los sábados.
Hay gran variedad de cervezas importadas, whisky y otros brebajes.
Lo recomiendo siempre.

Una buena opcion para salir a tomar algo por Palermo con amigos.
Es una casona enorme con patio atras, ideal para noches de primavera-​verano. Punto a favor: adentro hay aire acondicionado. Lo malo es que es medio confuso el tema de tener una barra afuera y otra adentro: en la de afuera al parecer solo venden cerveza o tragos rapidos y tenes que preguntar en especifico, si no tenes que ir adentro.
Pasan buena música (podria estar un poquito más alto el volumen) y los tragos zafan bastante, los precios son como cualquier lugar de Palermo. Para tener en cuenta.

Amo ir a Temple con amigos y disfrutar de un buen after office!!!
¿Terminas el día con el cerebro quemado del trabajo? No hay mejor opción que ir a un temple y disfrutar de una rica cerveza o de sus tragos!!! Voy hace 2 años a las distintas sucursales y han mejorado considerablemente los tragos!
Perfecto para aprovechar el happy hour, que por cierto, no es 2×1, sino una oferta en precios. La opción del fernet Agrandado es mi bendición! jaja
La hamburguesas y las papas muy ricas!!!
El ambiente, es genial! mucha gente que va a relajarse y a disfrutar. Los espacios exteriores son muy lindos!!! Perfectos para el veranito.
Voy a seguir yendo todas las semanas! Viva Temple!!! que como le digo a mis amigos: «venite al templo».

Cada vez más sucursales del Temple! Una excelente innovación palermitana de los últimos tiempos!
La cerveza tirada es fantástica, pasan buena música, el ambiente es relajado y amigable.
Pedimos honey beer, excelente como siempre, y gin tonic, q no desepcionó.
Es bastante ruidoso, no da para ir a charlar porque terminas a los gritos.
Es ideal para salir con amigos, una elección segura para cualquier tarde o noche!

Cervezas comunes, artesanales, y papas geniales.
Algo que me encanta del lugar, es el patio. Es bastante tranquilo dentro de todo y con una decoracion copada.
Fuertemente recomendado.

Temple de Costa Rica es el lugar que no te encanta pero siempre vas.
Las mesitas de afuera pero adentro (atrás de una rejita con vista a la calle) te llaman y son ideales para verano, tienen pocas mesas y no se llena tanto de gente como el patio que tiene atrás.
La atención no suele ser muy buena, pero cumple super bien para tomar una cervezas y comer unas papas con de todo.
Se puede reservar! Lo cual es muy práctico cuando es una mesa grande, pero un bajón cuando vas de a tres sin reserva y te querés sentar un jueves a la tarde. y está todo ocupado por carteles de RESERVADO.

Hacía mucho que tenía ganas de ir a este lugar y la verdad que no sé por qué no fui antes.
El bar está puesto en una casa chorizo antigua de Palermo, retirada de la vereda y con un patiecito chiquito al frente con varias mesas y una enredadera que cubre todas las paredes, ya se va sintiendo el llamado de la birra.
Cuando entrás el lugar es un poco oscuro, con la típica atmósfera de los pubs irlandeses: luz baja, barra de madera, algunas lamparas Tiffany y, lo que no puede faltar, buena birra artesanal.
Pasamos al fondo para ver de que se trataba y nos encontramos con un patio hermoso con lucecitas y muchas plantas, piso de ladrillo y NADA de ruido de la calle. Ideal para ir a charlar tranquilos.
Arrancamos por unas negras. Color bien oscuro, sabor super tostado, con un poco de caramelo y una espuma densa y cremosa. Riquísima.
Seguimos con unas honey. Doradas medio empañadas, se notaba perfecto el sabor a miel y la espuma era un poco más liviana que en las negras. Espectacular para el calorcito.
Ultimas vinieron las rojas. El color medio anaranjado ya daban ganas de tomarlas, el sabor algo especiado y super fresco.
Las tres son riquísimas, cada una tiene lo suyo. No podría elegir una sola.
El servicio super atento y con mucha buena onda, siempre preguntando si estábamos bien. Y nos trajeron unos pochoclitos salados para ir acompañando las birras.
Altamente recomendable.
_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​_​
UPDATE:
Aaaaa noooo lo que son las hamburguesas de este lugar. Anoche fui por un cumple y como no había cenado me pedí una Blue burguer. Enorme, pancito delicioso, queso azul y papitas. Un plato rebosante de puro amor hamburgueseril. Un placer.
También pedimos una porción de papas fritas, pero estaban muy húmedas para mi gusto.

Tiene varias «sucursales» pero este particularmente es el que mas onda tiene. Y el que por ende mas se llena, seguramente se debe a la ubicación.
Conviene ir temprano por varias razones, la principal es que las promociones son hasta las 22 hs de martes a viernes y hasta las 23 los sábados, y la otra es que se llena hasta las manos, y por el regimen de cantidad de personas a veces tenes q hacer cola.
Las promos son de 2×120 en tragos, los mas clásicos obvio, 2x$ 110 en pintas. También hay jarras pero tiene q haber un mínimo de 4 personas, asiq es mejor ir en grupos.
Hay promos de Jarra + pizza o papas, claramente es Quilmes, pero bueno.
Otra contra que tiene es que debido a la cantidad de gente q la frecuenta, el ruido ambiental es violento.

Nunca había ido a ninguno de los bares de esta cadena y un sábado por la noche andábamos con hambre cerca de este bar y decidimos entrar. No nos supieron decir si había lugar en la entrada, y empezamos a caminar hasta llegar al fondo… Hasta que encontramos el patio, donde había una mesa disponible.
Por suerte no hacía mucho frío para ser invierno y nos la bancamos comer afuera sin necesidad de tener la campera puesta. El patio es hermoso, cuelgan banderines de colores y lucecitas entre las ramas de los árboles, le da un ambiente ideal para una nochecita de verano.
Nos atendieron muy amablemente pero no entendimos muy bien el tema del happy hour de cerveza. El mozo lo explicaba de una manera extraña y nos terminó confundiendo más. Creemos que la idea es que hasta las 23hs si pediste dos cervezas de cualquier tipo, pagas una. Pero no sé porqué se enroscaba tanto.
Veníamos con muuucho hambre y optamos por las hamburguesas. Pedimos una Bacon Burger y una Temple Burger, que vienen con unas papitas de acompañamiento y una mayonesa de ajo INCREÍBLE! Estuvo buenísimo todo! La cerveza tirada también, probamos varias de la carta y no defraudaron!
Para la hora en que terminamos de cenar ya estaba repleto de gente parada alrededor de las mesas, así que se puso un toque incómodo (se apoyaban en nuestros respaldos de las sillas por ejemplo) y nos fuimos. Si queres conseguir lugar hay que ir temprano o reservar.

El lugar es lindo, el dia que fui yo explotaba de gente y no estabamos muy comodas.
La cerveza riquisima artesanal. Los tragos no los probe pero no me parecian muy pro, para tomar tragos ricos y bien hechos iria a Verne u 878.
Lo mas lindo es el patio en verano, esta lleno de plantas asi que es da una linda sensacion, y no se escucha nada de ruido de la calle.
Mucho mejor que el Temple del microcentro.

Beer? Check. Great outdoor patio? Check. Heaping pile of fries, hot dog and «cheddar» cheese? Check.
The kind of place you head with friends — a lot of them. This location of Temple Bar has a particularly good vibe, a cool space, and good happy hour prices in the neighborhood. Don’t expect any crazy quality, but they have a variety of imported beer and a few of their own on tap.
The bottom line: great place for beer drinking and merrymaking, especially if you’ve got a penchant for very large pitchers of beer. Don’t say I didn’t warn you.