Guacamayo

Conocí este lugar el viernes por la noche, en busca de comida mexicana.
El lugar promete cocina mexicana, española y árabe.
Decidimos pedir unos nachos con dos salsas para ir picando (la verdad que a las salsas le faltaba sabor, o picante, o ambos), mientras esperábamos una picada hiper ultra completa que traía 10 tortillas (que en la realidad trajo 12 :)
Nos trajeron una gran fuente de barro cocido con carne, pollo, cerdo y mariscos. Todo esto acompañado de unas verduras cocidas, frijoles y una salsita que al día de hoy no se de que era.
Además trajeron una pequeña fuente con verdura fresca y otra salsa con palta.
En general estaba todo muy bueno, pero como que le faltaba sabor, para la cantidad de fajitas que pedimos y siendo la opción mas completa, que traiga solo dos salsas no es suficiente. Además ninguna era picante y esto lo tuvimos que pedir aparte.
Pedimos algunas gaseosas y un Margarita que estaba muy bueno, y de postre un flan de naranja, que venía con una bocha de helado de dulce de leche y estaba buenisimo.
El lugar está bien, el precio es acorde, pero realmente podría ser un poco más sabrosa la comida.
La atención si bien un poco lenta, fue muy buena.

Fui el lunes 17 de febrero de 2015, era uno delos pocos lugares abiertos. Había un solo mozo para todo el lugar, la comida que pedimos fue una canasta de camarones y unas tartitas «oaxaca», ambos llegaron con el mismo «menjunje» de verduras avinagradas que parecían viejas y mirando las otras mesas TODAS las picadas (árabe/​italiana/​española/​mex) tenían el mismo tipo de verdura, que por cierto era horrible. La canasta venia acompañada de unos grisines decorativos que eran añejos y húmedos. Las tartitas… había una de queso hecho con muzzarella de mala calidad, muy agria, las salsas que tenían de tomate eran tipo de lata y el sabor impregnaba toda la comida. Estaba ademas frío. No es un lugar recomendable ni por precio, ni por calidad.

De todas las comidas étnicas que se puede probar acá en Córdoba, las tres más populares son la comida árabe, la comida mexicana, y la comida italiana (capaz que no cuenta, ya que muchos argentinos tienen raíces italianos.) Igual, muchas veces vas a ver restaurantes de esos tres tipos si estás buscando algo no argentino.
Guacamayo es como un desempeño sobresaliente entonces, porque empezó siendo solamente de comida mexicana y después ampliaron la carta para incluir comidas típicas árabes e italianos. Puede resultar un poco confuso, pero en realidad es perfecto porque si vas con un grupo grande, hay mucha variedad y nadie va a poder quejarse de no poder encontrar algo que le parece interesante.
De comidas árabes, ofrece todos los platos conocidos como niños envueltos, kepi, empanadas árabes, y mucho más. La comida mexicana incluye platos como enchiladas, tacos, fajitas, quesadillas, y más, todo con muchas salsas interesantes para probar. La parte italiana es también bien típica, con muchas pastas y salsas para elegir.
El ambiente es muy mexicano, con los colores de la bandera más amarillo. Vas a ver mucho adorno típico que va muy bien con la arquitectura de la casa vieja. Hay lugar adentro y afuera, así que podés elegir dependiendo del clima. Los precios son razonables para la variedad y calidad de las comidas que ofrece. Sería perfecto para una salida familiar o de amigos.

Es un resto bien imponente ubicado en una esquina bastante transitada entre los barrios Cofico y Alta Córdoba. Se trata de una casa antigua restaurada (lo lindo de la mayoría de los lugares de esta zona es que todos mantienen ese aire antiguo mezcado con un un reciclado un poco más moderno) que llama la atención a simple vista por la mezcla de colores que hacen referencia a los colores de un Guacamayo.
El interior parece transportarte a un lugar mexicano, colores verdes, rojos y amarillos y lleno de objetos típicos de este lugar. En un principio la comida también era exclusivamente mejicana pero después ampliaron la carta y ahora es marroquí, italiana y árabe, por lo que hay muchísima variedad de platos a elegir. Igualmente yo siempre pedí platos mejicanos, recomiendo las enchiladas y las quesadillas de hongos que son buenísimas y súper abundantes. De postre el único que probé fue la manzana azteca que viene con helado y crema pastelera. riquísimo!
La atención siempre me pareció excelente y los precios no son tan caros. Lo recomiendo!