Stopping

Después de una salida nocturna con Emme, terminamos en este lugarcito. Los colores y la pulcritud invitaban a entrar (y era uno de los poquísimos lugares que estaban abiertos para dos locas que daban vueltas a la 1 am un lunes buscando algo dulce), pero hasta ahí llegó el romance (?
Llegamos y un chico que trabajaba ahí, al ver que no hacíamos el ritual como los demás, nos procedió a contar cómo funcionaba.
Es un autoservicio de frozen yogurt, nada más y nada menos.
De derecha a izquierda, los pasos a seguir son:
–tres tamaños de recipiente para colocar lo que parecía ser un pedacito de cielo (chico, mediano y grande, con precios que iba de los 20, 30 a 40 pesos)
–tres sabores de frozen yogurt: crema, frutilla y combinado de ambos
–y luego venían los acompañamientos, que iban desde cereales, frutas y dulces. En los cereales, había ositos de frutilla, cerealitos de chocolate, etc. En las frutas, había pedacitos de banana, durazno, etc. En los dulces, había bolitas de chocolate blanco y negro, rocklets, y acá viene el primer punto negativo de la noche: gomitas. Apenas las recogí con la cuchara, me di cuenta que estaban duras. Después, podés agregarle salsas de frutilla, dulce de leche, chocolate, etc etc y luego te pesan eso y pagás por el peso de lo que te preparaste.
Me serví el combinado tamaño chico con casi todo, menos las frutas. Me salió $ 25. Nos sentamos afuera y lo probamos. Y ese fue el segundo punto negativo de la noche. No estuvo tan rico como se veía.
Vi que tenían waffles. Posiblemente vuelva y le de una oportunidad más para probarlos y ser si suben algunas estrellas.

AH NO ME MOERO ACA NOMAS. soy muy gorda fan del froyo y esto es un autoservicio! te servis la cantidad que queres, le pones todo lo que queres, te lo pesan y listo! Hay tres medidas: el mas chico ronda los 25 pe, el mediano 30 y el grande 40. Si no tenes ganas de ir al local y vivis en Nueva Cordoba te hacen delivery. Pero esto no queda aca, tambien tenes waffles y smoothies!
Le pongo cuatro estrellas porque con lo copada que es la propuesta me esperaba que hubiera mas toppings. Frutas solo quedaban pera durazno y manzana. Ademas, los tamaños son mas chicos que los de otos yogures helados.

Stopping le pinta la cara a Be fruit. Sin dudas. El local es más lindo, el helado es más rico y los toppings de mejor calidad. Pero entremos en los detalles:
Stopping está en la Estrada en un local amorosísimo como salido de Pinterest. Yo había probado los yogures helados de Be fruit y unos que hubo un tiempo en el Olmos y de vez en cuando googleo a ver si no abrió algún otro. Cuestión que había pasado un par de veces por el frente de este lugar pero siempre de paso hacia otro lado hasta que un día los planetas se alinearon y decidí ir exclusivamente. Tengo una especie de obsesión con el yogurth helado y sus topings y quisiera que hubiera un local en cada esquina porque sufro de una severa adicción.
El lugar ofrece la novedad del autoservicio pero si sos muy naba como yo, los chicos te lo preparan. Cuando vas por primera vez, las chances de que te salga un yogur helado mocho son altas así que dependerá de cómo manejás la frustración si decidís hacerlo vos o no.
Los toppings son variados y muy buenos. Pero lo mejor de lo mejor de lo mejor es que es por peso entonces podés dejar libre al monstruo exagerado y goloso que tenemos adentro en vez de desear que el que sirve sea igual de exagerado como vos al momento de servirte (lo cual nunca pasa, obvio!).
No sé a ustedes, pero a mi me embola que los toppings sean solo por arriba. Si, se supone que su nombre lo define pero yo quiero toppings por debajo también, así hay en todas las instancias del yogurth: cuando recién lo empezás, cuando vas por la mitad y cuando lo estás terminando y te arrepentís de no haber reservado un poquito de granola/​fruta seca/​galletitas para el final. La próxima pruebo hacer una base de topping + yogurth helado + topping de nuevo.
Lo que no termino de comprender es por qué no hay una proliferación de locales de este tipo. Yo cerraríà la mitad de las Grido (que si hay una por esquina!) y pondría en su lugar más locales como este.

Es un local en donde vos te armas tu propio helado y le pones los topping y salsas q quieras. 0% grasas

Buenisimo el producto, la atención y la forma de autoservicio, por que uno pone lo que quiere y no lo que te dan! Lo super recomiendo! Prueben los waffles!!!

Es un local, creo el único que vende este de productos en Nueva Córdoba.
Creo que hay otro en el patio olmos, pero no se si es yogurth.
Yo vivo en esta zona y este local abrió hace poco, un par de meses.
Al principio pasaba y pensaba que era una heladería, lo es pero de yogurth.
Un dia entramos a probar y realmente es raro.
Es una especie de autoservicio donde vos te pones lo que queres, si de frutilla u otro gusto que creo es de vainilla, pero no lo probé. Además tenes un montón de cereales y cosas para acompañar este postre., como frutas, granola, chocolates, salsas, etc.
Al final parece que comes algo dietético pero cuando empezas a ponerle de todo, ya tenes un montón de calorías en un solo vacito.
Es pequeño adentro, pero ahora pusieron mesas a fuera. Los otros días pase y había un grupo de diez personas comiendo afuera, me pareció ideal para ir con tus amigas o pareja. La verdad que es un lugar original, distinto, y la relación precio calidad es muy buena.
Lo recomiendo.

Stopping es un local bastante nuevo –abrió hace 2 meses– muy idóneo para barrio Nueva Córdoba, donde ya hay otra casa de este estilo, pero del otro lado de la Diag. H. Yrigoyen, sobre Ituzaingó.
Lo divertido de estos lugares es, no solo lo extraño de estar comiendo helado de yogurt, sino toda la variedad de cosas que se le pueden poner encima para hacerlo más rico: desde cereales hasta gomitas dulces, de pedacitos de fruta cortada, natural, a salsas de chocolate, dulce de leche y todas las demás, del estilo.
Hay muchísima variedad también dentro de cada grupo de ingredientes accesorios.
También es algo novedoso o al menos no tan típico, que para adquirirlo lo arma manualmente uno mismo:
Directo en la entrada está el dispenser para el paso 1 (todo muy señalizado de la forma más clara y concisa posible). Ahí se elige el tamaño del vasito y si se quiere el helado de sabor frutilla, de vainilla («neutro») o mezclados ambos.
Después se le agregan todos los ingredientes deseados, dentro de los disponibles. Y por último: se paga.
Están por poner el servicio para poder pagar con tarjeta, en teoría en los próximos meses, porque los clientes les suelen pedir esa forma de pago.

Stopping no es algo totalmente nuevo para mí, pero debo decir que en general el yogurt helado es algo novedoso. Probe este tipo de productos años atrás en Alta Gracia y la verdad que me gusto, no me volvió loco pero estuvo bueno. En esa oportunidad se trataba de una copa de yogurt helado con la que venían distintos trozos de fruta con salsa de frutilla y una oblea. Mi primera experiencia fue positiva. Pero con Stopping debo decir que sumo varios puntos a favor para que vuelva a probar este exquisito invento. También se trata del clásico yogurt helado, pero el que sirven en este lugar es mucho, pero mucho más sabroso, además tenes la opción de elegir no solo el tradicional sabor de yogurt sino también podes elegir yogurt helado de frutilla o hacerlo combinado.
Lo que más me gusta de este lugar es que es autoservice. A mi entender, todas las heladerías deberían ser así, ahorrarían en personal, sería más rápido si está bien organizado y hasta venderían más, pero bueno. Uno elige el pote que desea, en función del tamaño, luego carga el yogurt helado que desea y luego te podes servir los agregados que más te gustan. Tenes para elegir entre almendras, avellanas, chips de chocolate, galletitas orea, obleas y un montón de cosas ricas más. O sea, te armas el yogurt helado como vos queres. Eso es verdadero arte en yogurt helado. Luego lo pesas, te das cuenta que te pasaste, pero lo pagas igual y lo disfrutas de a poquito.

Si te gusta lo liviano y lo fresco, Stopping Frozen Yogurt es una buena opción en Córdoba. Ubicado en el barrio de Nueva Córdoba, Av. Pueyrredón 149, es un excelente lugar para probar algo distinto y fresco.
La propuesta del local consiste en comer un postre rico y natural; tienen una modalidad de autoservicio en la cual vos podes disponer de las proporciones, lo cual es un punto a favor porque se cobra por peso total. Solo tenes que entrar y servirte Yogurt directamente de la maquina dispensadora, tenés para elegir entre frutilla, natural o mixto, y después hay a tu disposición variedades de frutas y cereales para agregarle a tu gusto.
Como ya dije antes, se cobra por peso; en lo personal me resulta un poco engañoso porque si te pasas sirviéndote yogurt el precio puede elevarse bastante; por lo general, la relación precio/​beneficio es buena.
La atención del local es muy buena, lo que puede llegar a ser incómodo es el tamaño del local que es bastante pequeño, ya que es un lugar tipo «Café al paso», pero hace poco agregaron afuera del local un sector con sillas donde te podes sentar para descansar mientras disfrutas tu Frozen Yogurt.