Vittorio

Hermoso lugar. Ambiente agradable. Excelente atención de mozos.
Con eso arrancamos bien, pero además tiene una linda variedad de menú y siempre mantiene la calidad.
La especialidad de la casa son las pastas (típico de nombre italiano que hasta los nombres en él menú están en dicho idioma) sin embargo recomiendo las carnes del lugar. Cocción según tus preferencias y porciones generosas. Un muy lindo lugar para pasar en familia. No es un lugar para comer de paso rapidito así como tampoco es barato. Igualmente no se exceden demasiado con los precios (aunque esa percepción siempre depende del bolsillo que lo pague).
Además de las cenas y almuerzos es muy lindo lugar para desayunar y las opciones en este rubro están a buen precio.
El café es segafredo (dato importante para los que nos gusta él café).
También chicos y chicas si quieren quedar bien con sus novios o novias creo que es ideal.
Saludos!

Lo conocí gracias a la reseña de Gabriela, y le agradezco porque fue un hallazgo.
Está en una zona hermosa y el espacio está bien aprovechado.
La decoración me encanta y el patio/​jardín es espacioso y justo lo que quisiera tener en mi casa.
Fuimos con mi marido y mis dos hijos, el lugar es comodo para ellos, con un mangrullo y espacio libre sin molestar a los otros comensales.
Las pastas me encantaron y el menú infantil estuvo muy bien
Nos atendieron rápido y con amabilidad. No es poco por tratarse de un domingo pasadas las 14.

Si queres un restaurante variado tiene carta amplia !! Menos parrilla las pastas su especialidad pero tmb provee una trucha espectacular !! Mi preferida la ensalada

Uno de mis lugares favoritos.
Desde su ubicación en el tranquilo barrio de Villa Belgrano, hasta el restaurante en todos sus ámbitos es increíble.
Para ser más directa, empezando por la atención es muy buena. Los mozos saben lo que le preguntes, son muy atentos y están siempre a tu disposición. Su vocabulario hace honor al lugar de donde trabajan, cuando te entregan los platos te dicen «Bön Appetit» jaja.
Estructuralmente es muy lindo y cálido. Desde la musica, la decoración, el ambiente, siempre me sentí muy cómoda.
Y lo mas importante. La riquisima comida. Voy seguido a Vittorio y feliz de probar sus platos. Te entregan una entrada con panes caseros y pan de pizza con salsitas para untar. La carta es muy amplia, y los platos son muy abundantes y con muchísimo sabor. Tenes desde pizzas, pastas, carnes, pescados, pollo, risotto, anipasti, una carta de vinos muy amplia y postres muy ricos!
Detallaría muchísimo mas pero les dejo algo concreto para que lean rápido y se decidan en ir!
Amo Vittorio!

La passsta posssta
Luego de girar y girar por la zona encontramos abierto un domingo a la noche este lugar tano. Es gigante, tiene mesas grandes y cómodas, y tiene muchísimas mesas. La atención fue excelente, se acercaban todo el tiempo para ver si hacia falta algo o como estaban las pastas. Antes del plato principal unos pancitos calientes y un quesito me hicieron muy feliz.
La pasta estaba muy bien, me pedí unos ñoquis al ragú (o como se escriba) y estaban muy buenos. Los ñoquis son grandes, parecen pocos apenas ves el plato pero es llenador, el estofado estaba también muy rico y tenia bastante carne que es lo importante.
No me pareció una locura pero estuvo bastante bien, el dato más importante es que abre los domingos a la noche. Y siempre es bueno terminar el finde comiendo pastas posta posta.
Pd: mi próxima reseña de un lugar italiano la hago en italiano.

Lejos y regular.
Vittorio es, en los papeles, mucho más de lo que termina entregando en la práctica.
Con un lugar muy grande, lindo, bien decorado, cómodo, con mesas al aire libre calefaccionadas para fumadores y un espacio interior muy cálido.
La atención fue excelente (hay que aclarar que fuimos en un momento de bajísima ocupación, pero igual) rápida, amable, cordial y proactiva, diez puntos en este aspecto.
Respecto a la comida, es donde pierde todas las estrellas que le faltan. Desde los errores de ortografía en los nombres de la pasta en la carta que no presagia nada bueno, hasta la pasta en sí, nada supera las 3 estrellas.
Pedí unos spaghetti al pesto y puedo decir que es el peor pesto que probé en mi vida, hecho, aparentemente, con provenzal de sobre, con los fideos nadando en medio cm de aceite en el fondo del plato, nueces enteras como decoración y absolutamente nada, nada de sabor, aunque, curiosamente, el olor a ajo se sentía desde el baño masomenos, en el sabor no se hizo presente.
El resto de los platos tampoco parecían descollantes, ni desde el relleno de la pasta ni las salsas.
En resumen, es un lugar que, infraestructuralmente, podría dar mucho, pero en lo más importante parece quedarse corto.

Vittorio. Un clásico de Av. Gauss que no hace mucho me hicieron conocer. Me sentí en mi casa la primera vez que fui u debo reconocer que cada domingo que abro los ojos al despertar, me dan ganas de ir a desayunar ahí.
La atención es excelente. Se nota la educación y preocupación de todo el personal. Aplausos.
El ambiente es muy lindo y cordial. Familiar diría. Lamento que con las nuevas remodelaciones en el sector frontal (cierre con toldos) permitan fumar. Se transforma en un espacio cerrado por lo que la ordenanza se está rompiendo.
Yendo al tema comida la carta es variada y más que interesante comenzando desde el desayuno, almuerzo o cena. Los precios acordes a la atención, el lugar y las porciones y su calidad.
Wifi abierto, algo que deberían imitar muchos lugares. Insisto en la atención cordial del lugar.

Muy lindo lugar, muy buena atención!!! Los platos súper abundantes, y de muy buena calidad. Sin dudas volveré!!!

Vittorio es un restaurante bien familiar que para mi es el plan ideal de domingo al mediodía. El ambiente es tranquilo, el lugar espacioso y decorado muy lindo. Tiene mesas afuera y jardín como para que corran los niños o vos si te copa mucho correr después de comerte un plato de pastas. Además hay juegos, esto sí para los niños, si te subís seguro te sacan a patadas y hacen muy bien.
Venden pastas, carnes y otras cosas más pero siempre consumí pastas. Son riquísimas y abundantes. De entrada te sirven esas tiritas de masa de pizza con alguna salsita. Yo almorzaría directamente eso, las amo. Te podés sentar adentro o afuera, afuera es divino el pasto cortito y hay sombra. Adentro es re cálido. Se llena de gente así que por ahí lo ideal es reservar.
Es un lugar medio caro pero como siempre voy tipo salida familiar cuando vienen mis viejos de visita, nunca pongo un peso (dignidad:cero) así que no sé cuán caro es.
También se puede merendar pero nunca fui, sólo vi lo que hay en la carta.
La atención es excelente y según mi viejo hay buenos vinos, yo no sé porque consumo coca cola y caramelos como si tuviera diez años.

Hermoso restaurante ubicado en la zona de arguello. Muy lindo para salir un rato de la parte más ruidosa de la ciudad y disfrutar de una rica comida en una parte más tranquila.
El lugar es estéticamente lindo, amplio y bien cuidado. Se trata de una casona antigua reciclada pero que no pierde su esencia. Mucha mader y tonos cálidos. La comida de este lugar es realmente muy rica, mi favorito siempre que salgo a comer como ya puse alguna vez el otra reseña son las pastas y las de Vittorio son unas de mis favoritas, sobretodo los agnolotis gratinados, son riquísimos además de ser muy llenadores, las salsas también una delicia.
Los precios son más bien altos, reciben tarjetas y la atención siempre muy buena. Lo recomiendo para ir cualquier día, si bien los findes está más lleno siempre que fuí conseguí lugar.

Es un restaurante a lo italiano, el lugar es muy lindo es una casa vieja transformada en restaurante. y tiene una gran patio adelante con mesas que es muy lindo para almorzar o cenar ahí.
También está abierto a la hora de la merienda. Pero su especialidad son los almuerzos y las cenas. en fines de semana recomiendo reservar porque imposible conseguir lugar, siempre se llena de familias y todo esta ocupado.
Yo pido ñoquis con salsa mixta, pero también hay otra variedad en pastas como cortes de carnes o pollos o sino risotto que si bien es italiano no son pastas. Por último tiene ensaladas abundantes y riquísimas o algo mas original como un crêpe de camarón que yo los probé y son exquisitos.
Es un restaurante muy tradicional y familiar, con mucha calidad. los mozos siempre atentos y les recomiendo siempre buscar una mesa afuera. si bien la casa es linda las mesas de afuera también lo son y la atención es la misma

Muy buen lugar. Muy familia, hace falta siempre reservar en los fines de semana.
Muy buena la presentación de la comida y la calidad. Los precios son accesibles para la zona y la calidad.
Mesas tanto fuera como dentro del lugar permiten elegir a nuestro gusto como disfrutar de la comida.
Los mozos son muy atentos y siempre colaboran.
Solamente tiene como negativo una poca variedad en cervezas. Con lo cual en las tardes de verano no es el mejor lugar para ir por cervezas.
El menu es variado y con productos de buena calidad y muy buena preparación.