Wunderbar

Fuimos para un after office y casi todos pidieron chop artesanal Tío Sam (2x$ 80). Yo pedí un daiquiri y estaba excelente: un sabor a frutilla intenso y mucho hielo. También nos dieron promo de pizzas (2×1); yo la pedí antes por tel. xq éramos un grupo grande, pero quizás está disponible siempre.
Los mozos atienden rápido. El lugar es hermoso, las mesas están entre varios árboles y eso lo hace muy relajado. Tiene la opción de cubrir una zona afuera por si llueve (hay toldos) y también hay mesas adentro. Los baños impecables y la música a un nivel normal para poder hablar (si, ya toy vieja).
Muy recomendado para grupos o parejas (tiene como un no sé qué romántico).

Lindo Lindo Lindo Lugar!!!
Una propuesta súper bonita. Un patio con varias mesas, arbolitos llenos de hojas y flores que te invitan a escapar un rato del cemento y hundirte en este maravilloso lugar de güemes.
Lugar de una oferta gastronómica basada en tablas y pizzas con la posibilidad de acompañarlas con buenas cervezas. Hay variedad de birras y además la opción de cerveza artesanal (Chop del Tio Sam) que es económica y rica (la negra en particular).
De precios anda bastante bien y la atención por parte de los chicos es rápida y con muy buena onda!
Me encantó el lugar!
Van sólo 4 estrellitas de odiosa por habernos traído pizza de rúcula y pasto =). Único detalle en contra, la rúcula es de huerta propia, pero viene con pastito incluído ;)

El patio esta impecable, te atienden amablemente y no demoraron más de cinco minutos en servirnos. Las cervezas siempre heladas y el maní es nuevo y rico, no como en otros lugares. La música esta a un volumen ideal y lo único que mejoraría el ambiente sería escuchar un par de temas de los redondos. Baños impecables y muy cómodo el bar. Vengo seguido u voy a volver.

No hay carta de tragos pero el ambiente está muy copado. Hay árboles entre las mesas y una onda distendida.

El lugar esta en pleno guemes. Lo mas lindo es el patio, donde se puede cenar bajo los arboles. La atención es súper rápida. Las pizzas y picadas son muy ricas. Los tragos muy bien también, y los precios son bastante accesibles! Lo súper recomiendo !!

lindo bar con patio e interiores ambientados. Mozas/​os amables y buena variedad de cervezas y tragos. Un poco caro nada mas.

Llegó el fin de semana! Buscando a dónde ir a comer algo y pasar un buen momento con amigas, conocí este lugar.
El primer impacto fue a nivel visual, ni bien ingresas hay un patio grande con muchas mesitas que invita a relajarse, al parecer no solo es un bar de copas sino un lugar de encuentro para aquellos que buscan disfrutar de una linda noche.
La decoración un tanto vintage y alegre, con bombitas de colores que alumbran en diferente forma el lugar generando un clima acogedor. Armoniza perfectamente con la música alegre que suena de fondo, siempre canciones de rock nacional o internacional, en un tono moderado lo que permite que se pueda charlar tranquilamente mientras se disfruta de las ricas pizzas que sirven en el lugar. Además tienen otras opciones, ya sean picadas, rabas, etc.
La atención combina perfecto con el lugar, los mozos son muy amables y están en todos los detalles. La comida sale rápido, lo cual es fantástico si tu idea es tomar algo, a modo de previa, y seguir la noche! Todo el buen clima del lugar está acompañado por la mirada atenta del dueño quien con mucha simpatía ayuda a los mozos en la atención de las mesas.
Creo que el lugar le hace honor a su nombre! Es maravilloso!

Wunderbar es uno de esos bares acogedores que siempre te sentís como en casa. Ya sea para una cita con tu chica o con tu grupo de amigos del colegio en wunderbar la vas a pasar bien
Tienen un sector al aire libre gigante que en invierno lo cubren casi por completo. También, si tenés mucho frío podes pedirte una mantita.
Tienen cervezas importadas y unas picadas impresionantes (la tabla criolla es prácticamente una parrillada). También, si pedís, tienen fireball (whiskey de canela) y jagger bombs.
Se destaca por sus precios bajos, su buena atención y un patio muy copado.

Wunderbar es un bar copante por muchas razones. Para empezar, está ubicado en el barrio de Güemes, una zona muy artística y pintoresca de la ciudad. A pocos metros del la Feria de los Artesanos, resulta una buena forma de cerrar el recorrido o de terminar el día junto a los amigos.
Cuenta con un menú completo y con una excelente calidad culinaria. Todas las veces que comí allí los platos me parecieron riquísimos (incluida la tabla vegetariana). Además, la carta presenta un generoso apartado de bebidas. Por esa razón, Wunderbar no es solo un buen lugar para cenar, sino también para tomar algunos tragos ricos.
Otro aspecto que me gusta mucho de este bar es su disposición física. Muchas mesas están ubicadas en el patio, lo cual permite a los fumadores disfrutar de sus cigarrillos, y a los amantes del aire libre, cenar bajo las estrellas. Por su parte, la decoración es pintoresca y acertada: afiches de toda procedencia y objetos estéticos abundan en cada rincón.
En cuanto a la atención, en mi experiencia es muy buena. Nunca tuve que esperar demasiado, incluso cuando el bar estaba lleno. Y los precios son de lo más razonables, si se considera la relación costo-​calidad.
Recomiendo este bar a quienes busquen un lugar fresco y relajado para disfrutar con amigos.

Es uno de los bares más lindos de Güemes. Lo conocí por primera vez cuando buscábamos con amigos un lugar para comer y quedé encantada.
Tiene un patio hermoso con mesas donde ubicarse y algunas otras (pocas) en el interior del local. La decoración está muy buena, paredes con algunos dibujos individuales (inspirados en Alicia en el País de las Maravillas), cuadros colgados e imágenes antiguas, tipo coca cola.
Es un buen ambiente, con buena música y se ven variedades de personas como grupos de amigos, gente grande y niños. Los viernes, sábados y domingos se llena. De ahí que es mejor llegar antes de las 22 horas.
La carta que maneja el lugar es variada. Hay cazuelas, sándwiches, pizzas y tablas. Probé la «Tabla Wünderbar» que tiene salchichas, milanesas, chucrut, queso, rabas, salsita, acompañadas de pan casero y es riquísima. También hay variedad de cervezas nacionales e internacionales (como Kunstmann, Amstel, Grolsch).
La atención de los mozos es excelente, te traen los pedidos rápido y están siempre atentos a cualquier cosa que necesitás.

«El bar maravilloso», en alemán. Se trata de un espacio abierto de grandes dimensiones, decorado como un jardín de noche. El ambiente es tranquilo, con poco ruido, música a volumen suave y una iluminación difuminada por la lejanía de los faroles (que están a mayor altura que en otros lugares)
La comida es buena, especialmente las tablas de fiambres y las picadas. Las entradas no se quedan atrás y, aunque parezca irrisorio mencionarlo, el maní es de muy buena calidad, algo de lo que pocos bares pueden jacatarse.
La variedad de cerveza depende del día, pero en general se puede encontrar buena oferta de cerveza dentro de las marcas convencionales (Heineken, Stella, etc.) La disposición de mesas y sillas está bien pensada. La entrada es bien amplia, lo que da la impresión de estar ingresando en una vivienda de campo. La puerta que da a la barra de tragos no hace más que confirmar esa impresión. Los baños son muy limpios y el personal es amable y veloz para atender los pedidos. Suele ser muy concurrido los días domingo.
Si lo que se busca es tranquilidad y aire, lejos del amontonamiento y las demoras, Wunderbar es un bar que viene muy bien para una cena tranquila entre amigos, con una pareja o una cena familiar informal.