Montecarlo

La zona centro/​Casino/​Hotel Provincial de Mar del Plata tiene juna mala reputación… y podemos ver por qué: especialmente en la zona que mira al mar está todo abandonado, o marginal, o con olor a meo o alguna combinación de las tres cosas.
Dicho esto, llegamos medio tarde para comer, estábamos buscadon una opción que sirviera hasta tarde y no nos rompieran la cabeza, y nos cruzamos con Montecarlo, justo en la punta del edificio del Casino que mira al norte. Una ubicación privilegiada, especialmente fuera de temporada cuando las masas no están bajando a la Bristol.
De todas maneras, antes que nada entramos por la promesa de un menú de 60 pesos por plato y postre, que es barato para el standard que se lo mire. Y que buena sorpresa cuando resultó que el plato estaba bárbaro, rico y generoso.
Otros detalles: el precio es menor que el de un local de comida rápida, y sin embargo tenes una camarera que te atiende en la mesa, que tiene una panera generosa, servilleta de tela, cubiertos bueno, te sirven en un plato que es un plato… no nos tendría que sorprender, salvo que en ese nivel de precio es muy raro.
La experiencia fue lo suficientemente buena como para volver, no por necesidad o desesperación, sino por elección.

Rico, bien ubicado y sorprendentemente MUY BARATO!
Recién llegados a Mar del Plata y entrando a La Rambla del Provincial nos topamos con un cartelito que decía: «Menu del Día: Arroz con Pollo + Postre= $ 60» (Noviembre 2015).
El lugar se veía bastante bonito, teníamos hambre y What-​the-​Hell, entramos sin muchas expectativas, sólo comer lo que (por ese precio) creíamos que serían dos cucharadas de arroz con una palomita en medio.
Y NO… FUE UNA LOCURA: El «Arroz con Pollo» resultó ser un delicioso risotto con pechuguitas, papas a la española y arvejas, muy bien presentado
(foto), abundante y repito: DELICIOSO.
El postre, también abundante, era un plato con tiras de queso y dulce de membrillo (genial!) o café.
VOLVIMOS unos días más tarde. Ésta vez el menú consistía en pastas (a elección ravioles, sorrentinos o linguini) con jamón, muzzarela y un gratinado de parmesano. De postre, helado. (También, todo por $ 60).
Los invito a que vean las fotos y ahí entenderán por qué a un restaurant tan barato lo califico con 4 estrellas.
La atención también fue muy buena. Un hallazgo.
Super recomendable y gasolero.
Saludos,
I.