Jajajaja! Mi novio es fan de los carritos!!! Y así, me lleva a comer a un montón :P bueno, no tantos, pero este estuvo buenísimo. íbamos camino a la isla y, confieso, se nos había pasado un poco la hora. Ya no daba hacer algo a la parrilla, así que optamos por quedarnos en el carrito Tomate y Lechuga. Yo amo las papas fritas, así que pedimos papas, yo hamburguesa completa, mi novio choripán(yo chori, no, a menos que sea de puro cerdo bien sequito, paso). Estaban muy ricos. Nos tomamos unas gaseosas que venían en el combo y problema solucionado! Además tenían todas las comidas típicas de carritos, sandwiches calientes, carlitos, hamburguesa con queso, y los condimentos comunes, mayonesa, savora, ketchup, chimicurri… Saciados y bien comidos, nos fuimos a la isla!
Fernando G.
Rating des Ortes: 4 Rosario, Argentina
Estar a orillas del Río Paraná durante el anochecer rosarino, es una buena oportunidad para optar por comer algo en alguno de los tantos carritos que frecuentan la zona. Yo me considero una persona totalmente autorizada para hablar bien, mal, o más o menos de cada uno de ellos porque los tantié más de una vez a todos. Anteriormente, en una de mis reseñas me declare fana número 1 de Empanadas La Tucu, y es buen momento para afianzar dicho pensamiento. Sin embargo, no siempre tengo ganas de comer empanadas. Y sé muy bien que sí ofrecería otra cosa, también seríà la mejor. Pero la realidad hoy, por lo menos, es otra y quien encabeza mi ranking local de hamburguesas es: Tomate y Lechuga. Rodeado de banderas Argentinas y un lema estampado en su pared que dice«Bienvenidos a Rosario», el clásico carrito rosarino ofrece todas las comidas rápidas conocidas brindando un servicio de atención y calidad muy buena. Hamburguesas, panchos, choris, carlitos, papa fritas y más. Salen rápidos y muy ricos, y las promos vienen todas con gaseosa, siendo de precio realmente accesible. Remar de vuelta muchas veces se vuelve agotador, más cuando se hace de noche y se quiere llegar rápido a destino. Créanmelo, a la mitad del río ya se siente el olor de lo que me espera y se vuelve mí incenstivo más poderoso.