Mi panadería predilecta en todo el perímetro de compras de la zona. Sus facturas son bocados, porque son más bien chicas, pero tienen la consistencia y el sabor justos. Es ésta una sucursal de una Florencia ubicada más al norte, y si no me equivoco hay alguna Florencia más dando vueltas por ahí. El local es limpio, espacioso, perfumado de pan. Y si bien no rebosa de vitrinas llenas de cosas, como ocurre en panaderías más instaladas, sí hay bastantes pasteles como para tentarse. Es que el local de Florencia de Ovidio Lagos es relativamente nuevo. Quizás porque los precios son un poquitos más altos que en otros lugares, no hay nunca mucha gente en el local. Esperemos que esto sólo sea una impresión mía, y que Florencia prospere, porque sus cosas, insisto, son muy ricas. Además, las vendedoras son muy atentas. Conclusión: recomendad panadería sobre la avenida, tanto para los lugareños como para quienes anden por la zona antojados de facturas o alfajores de chocolate. Consejo: agarrar las bandejitas grandes, porque todo lo que hay es muy bueno.