Fuente de las Utopías

Conocí la Fuente de las Utopías por un documental que hizo un amigo para su instalación definitiva hace más de diez años. Antes estaba abandonada en un depósito de la Municipalidad y la Secretaría de Cultura y Educación la restauró y reubicó con el reconocido artista plástico Dante Taparelli a la cabeza del proyecto.
Recuerdo la inauguración, fue hermosa, habían puesto muchas luces alrededor de la fuente y hubo un espectáculo. Después de ahí la Fuente de las Utopías volvió a ser escenario de actividades como un concierto del Ensamble de Vientos en un ciclo llamado Fuentecitas o una intervención de danza en el Festival El Cruce. Es que es tan poética su imagen que es el marco ideal para estos eventos.
Asimismo muchos chicos le dan una utilidad en verano, ya no se lo ve tanto, pero hace unos años era utilizada a modo de pileta de natación/​bañera por niños y adolescentes que daban vueltas por allí.
Es el centro de la unión de la bajada Sargento Cabral y avenida Belgrano y corona esa intersección muy adecuadamente al paisaje con el bello edificio de la Aduana.

Las Utopías de Dante
La Fuente de las Utopías es una de las tantas obras con la que el maravilloso artista Dante Taparelli ha aportado a través de su recuperación al arte y la cultura de la ciudad de Rosario.
La Fuente de las Utopías, antes ubicada en el ex predio de la Sociedad Rural, es una obra original del artista local Carlos Righetti. Dante Taparelli fue quien presento el proyecto en la Secretaria de Cultura de la Municipalidad para su restauración y re-​localización como forma de elevar el significado histórico y social del tradicional sector urbano donde funcionaba la Aduana. Así para el ano 2004 la obra fue inaugurada en Sargento Cabral y Avenida Belgrano con un espectáculo del tenor local Juanjo Cura
Si estas caminando por la zona pasa a ver esta hermosa obra que el genial artista plástico le trajo de vuelta a toda la ciudad de Rosario.

A pasos de la antigua Aduana se encuentra la Fuente de las Utopías.
MI papá me contó mil veces su historia de chiquita. Hoy recién le encuentro el sentido y la importancia.
Donde la bajada Sargento Cabral desemboca en Av. Belgrano, a pasos del río, el imponente edificio de fuerte estilo francés que diera lugar a la aduana se suma a la Fuente de las Utopías para brindar una de las postales clásicas de Rosario.
El pasaje Cabral alberga esta obra de arte que fue reinstalada por el artista Carlos Taparelli e inaugurada hace unos diez años atrás.
Bella por donde se mire, es postal de la ciudad y usada por fotográficos profesionales y amateurs para dejar plasmado su arte para siempre.
Carlos taparelli también fue el responsable de decorar los frentes del Jockey Club de Rosario (su sede en calle Maipù y Córdoba) y de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Rosario, ubicada en Santa Fe y Francia.
Todas sus creaciones son un estandarte de la ciudad, edificios preciosos estructuralmente, con una arquitectura que quedan pocas.
La Fuente de las Utopías es un icono de la ciudad.

Otro de esos lugares mágicos en Rosario, cargados de historia y Arquitectura, emplaza frente al edificio de la aduana de rosario, combina perfectamente con ella, hace que el lugar parezca salido de una película europea, tanto de noche como día forma una hermosa postal de Rosario. Su nombre le calza como los vestidos de Coco Chanel, contemporáneo en su reinstalación, pero antigua en origen y forma.
Ahora bien, haciendo un poco de historia (no tanta), esta ubicada dentro de lo que se denomina Parque Nacional a la Bandera. Esta maravillosa fuente fue reinstalada por el artista Taparelli e inaugurada en el año 2004, antes estaba ubicada en el ex predio ocupado por la Sociedad Rural Argentina en el Parque de la Independencia. Fue una creación de Carlos Righetti y Cía., uno de los primeros estucadores más prestigiosos y de mayor reputación de Rosario.
Righetti había aprendido en Francia la técnica y la artesanía de la decoración, la yesería y el estuco, y fue el quien décoró el frente de la Facultad de Medicina, la Jefatura de Policía e innumerables casas ya desaparecidas. En Rosario, en 1903, se asoció con Gusella y Staffieri, quién era escultor de obra, el más artesano de los socios, y trabajó en el taller de su propiedad, que aún hoy existe en la calle España. Más tarde, de 1904 a 1909, la firma fue Righetti, Gusella y Fontana, una sociedad compuesta por hombres activos, que poco a poco suplantaron a las empresas que venían de Buenos Aires.

Me fascina contemplar esta obra de arte. Carlos Righetti, un prestigioso estucador de Rosario fue el creador de esta fuente, Inicialmente se encontraba en el Parque Independencia en el ex predio de la Sociedad Rural, pasando desapercibida, en estado de abandono prácticamente, pero en el 2004 fue trasladada al Parque Nacional a la Bandera, frente a La Aduana. La idea la impulso el genial Dante Taparelli, gran artista plástico que posee Rosario, quien se encargo junto con un equipo de la restauración de la fuente. La fuente de las utopopías era conocida como fuente de las sirenas o del Tritón., debido a que en la escultura se aprecian tres sirenas sosteniendo una enorme concha marina y en esta yace Tritón, Dios de los mares soplando un caracol y sosteniendo una sirena. Dante Taparelli explica que no es una deidad el hombre de la fuente, sino un pescador que atrapa a una sirena en sus redes, de ahí es que le asignan el nombre de Fuente de las Utopías. Es imposible pasar por el lugar y no admirar su belleza. Gracias a estos dos grandes artistas rosarinos, hoy podemos disfrutar de su belleza en un lugar estratégico de la ciudad.

Fuente de las Utopías. ¿Puede tener un nombre más hermoso?
Está ubicada en la confluencia de las calles Urquiza, Belgrano y Sargento Cabral. Fue inaugurada en el 2004 por Dante Taparelli, un artista rosarino muy talentoso.
Cada vez que paso caminando por ahí, me parece un paisaje sacado de una película. A este escenario se le suma el increíble edificio de la Aduana, una obra arquitectónica con estilo francés, y como ciere: el Río.
El único «contra» que le encuentro a esta singular rotonda, es que desconcierta a la hora de cruzar la calle. Los semáforos son muy cortos, y muchas veces te encontrás en la mitad de la calle sin saber si seguir cruzando o esperar.
Si todavía no recorriste este sector de la ciudad, te recomiendo que lo hagas, ya que en mi opinión es uno de los lugares más lindo de Rosario.

Me encanta esa fuente de Rosario. No sólo por la belleza de la obra en sí, sino porque está en la confluencia de varias calles de la ciudad y puede ser apreciada en sus distintos ángulos. No todos saben que se llama la Fuente de las Utopías. Algunos la denominan la fuente de la Aduana (por su proximidad) o la fuente de Sargento Cabral (una de las calles que la atraviesa).
Creo que lo que más me gusta de este ícono local, y no sólo a mí, es que embellece la escenografía. Muchos fotógrafos la eligen como postal de sus campañas de moda, o las quinceañeras y novias para hacer sus fotos de álbum. La calle es de adoquin, la iluminación es bella, y eso suma en calidad fotográfica. Uno de sus fondos es el viejo y emblemático edificio donde hoy funciona la Aduana (patrimonio de la ciudad)
A veces se ve alguna que se tira agua al estilo Anita Ekberg en La Dolce Vita. Una vez pasé en el auto, ví a una tratando de meterse, y le grité; «Anita». No sé si habrá entendido, pero ella se pensaba que era la Fontana Di Trevi. Eso es lo lindo del nombre de esta fuente, las utopías y los sueños, aún son gratis.

Me acuerdo cuando la Fuente de las Utopías llegó al barrio. Fue en el año 2004 y yo tenía 14 años. Me sorprendía fuerte, y a los vecinos también, una fuente emplazada en una rotonda en el medio de una avenida de cuatro carriles…
Más de diez años después, es parte del paisaje definitivamente. Eso sí, dificilísimo es tratar de cruzar la calle por la senda y no correr rápido hasta donde está la misma fuente y después, de nuevo correr, pero a la vereda de enfrente.
Es sin duda uno de los lugares que más me gusta contemplar cuando voy por el parque.
Digna de quedarse a ver.