Mercería Canela

Excelente lugar para encontrar el cosito que va con el cosito. Encontras lo que quiera en un lugar q no lo esperabas. Es una mercería que está equipada con lo que busques. Con la atención cordial y amable. Ubicada estratégicamente para salvarme de ir hasta el centro. Tiene desde distintos tipos de cintas, botones, hilos, lentejuelas, elásticos, pañolenci, y muchos etc más. No se lleva las 5 estrellas a modo de incentivo para mejorar el tiempo de atención (no el modo, xq es excelente) y el tamaño del lugar, pero realmente lo tendría merecido por ser de barrio.

Mercería Canela es una mercería bien de barrio, aunque su pequeño local está ubicado en la comercial Avenida Alberdi, junto a grandes negocios.
Estoy más que agradecida con la existencia de este lugar, ya que me ha salvado varias veces!!! Una vez estaba buscando hilo verde musgo (si, hilo verde musgo!!! jaja) y no conseguía por ningún negocio por la zona, y la verdad que no quería trasladarme hasta el centro. Dije, no puede ser que no haya una mercería completa por acá??! Hasta que mi novio me señaló ésta y entré sin dudarlo. La chica estaba justo por cerrar el local, era mediodía y ellos hacen horario cortado, pero me atendió de la mejor manera con toda la dedicación como si fuesen las 9 de la mañana y estaría recién abriendo en local. Me mostró varias tonalidades de verde para que encuentre el que estaba buscando peor ninguno parecía ser el color indicado. hasta que sacó de un cajón de abajo el verde musgo que tanto estaba buscando. Lo llevé sin dudar demasiado, aunque no era la marca que estoy acostumbrada a comprar. La calidad no resultó ser de la mejor, el color era idéntico, pero era una marca más barata y no tan resistente como la que buscaba.
Desde ese día que voy siempre a esta mercería cuando necesito reponer el botón de alguna camisa o cambiar un cierre del pantalón. Tienen muchos productos: hilos de todo tipo, puntillas, cierres, botones, ganchos, etc. La señora que atiende también realiza trabajos chicos de costura. Tiene muy buenos precios.

Que mercería chiquita pero que completa!!! Es un local muy pequeño que no entran más de cuatro personas, tiene un mostrador y una exhibición de lo que vende en su diminuta vidriera.
Tiene algunas estanterías llenas de mercaderías, de todo tipo, con diversidad de colores y de materiales, siempre compro en ésta mercería todo lo que se refiere para el bordado de trajes de patín de mis hijas, no solo por la calidad de los artículos sino por la excelente atención que tienen, siempre muy amablemente y asesorándote en lo que necesites. Es un lugar lleno de hilos de coser de todos los colores, cintas de todas las medidas y en todas sus gamas de colores, lentejuelas, mostacillas, cierres de diversos tamaños, etc.
Éste local se ubica en calle Av. Alberdi al 800, es atendido por sus dueñas que hacen que el cliente se sienta cómodo y encuentre lo que busca. También hacen algunas confecciones y arreglos de prendas. Todo muy económico. Trabajan solo con efectivo. Ésta mercería es una de las pocas que tiene un stock tan completo a pesar de ser un lugar chico. Tiene una muy buena clientela que la sigue hace años. Es muy recomendable!

¡Si me habrá sacado del apuro esta mercería!
Cuando se me salió algún botón de una campera o camisa, o cuando necesitaba breteles de corpiño de un determinado color para que combine con lo que tenía puesto o para que no se vieran, entre otras ocasiones.
Tienen lo típico que encontramos en cualquier otra mercería. Pero a mi parecer la variedad de ésta es mucho mayor a otras.
Busquemos lo que busquemos, seguro lo tienen. Y en el color que queramos. Y hasta encontraremos artículos que ya no se ven por otros sitios.
Hace años que está en el barrio, y es una de las más elegidas. No sólo por todo lo que ofrece sino también por la buena atención. Las veces que he venido me atendió una señora –desconozco si hay otros vendedores– que fue más que amable y simpática. Y eso suma, mucho.
Los precios son variados, pero generalmente económicos.
También hacen arreglos de prendas y costuras.
Excelente lugar. Lo recomiendo.

Estaba buscando algo que no sabría si volvería a ver en mi vida.
Herede de mi abuela, un hermoso mantel de hilo bordado por ella, era una experta bordadora española, aquí le otorgaron una medalla por sus trabajos.
Ella manejaba muy bien los bolillos y hacia tiras de encajes con una habilidad increíble, podía estar horas mirándola. Una vez intentamos juntas, pero a mí me pareció un jeroglífico imposible, de hecho lo es, es una escuela de tradición pero debes tener condiciones.
La cuestión es que se rompió parte de ese exquisito bordado en el mantel.
Antes, estas obras de arte, se llevaban a lavar a las monjas, no sé cuáles eran en Rosario, pero eran expertas en el tratamiento de sabanas, encajes y manteles, camisones y prendas demasiado delicadas y difíciles de planchar y de mantener libres de manchas.
Decidí repararlo, cambiando aquellas partes del bordado con uno parecido al original.
Cuando pase por la vidriera, no me lo podía creer, la mercería no es moderna, pero atesora materiales y cosas que ya no las vas a volver a encontrar con la calidad de antaño.
La señora entendida y súper amable me indico lo que se podía hacer, es más, me recomendó una señora mayor bordadora que lo haría con mucha delicadeza, le di un beso de la alegría que me causo.
Volveré por muchas cosas más.
Debería haber una política de negocios en el patrimonio comercial de la ciudad, un catálogo de tiendas como estas, que no deben dejar morir jamás.