Casa Museo Buffo

Llegas hasta unquillo, de ahí pasas un poco más y llegas a cabana que vendría a ser un pueblito aparte dentro de unquillo, empezas a subir por la montaña por una baje de tierra y llegas a la capilla de Buffo. Buffo fue un hombre que tras transitar por muchas Ciencias se instaló allí por el clima! Formó una familia y lamentablemente vio morir a esposa e hija de la mano de una enfermedad. Su forma de inmortalizarlas fue haciendo este mausoleo en forma de capilla, es toda una joya de la arquitectura y física. Tiene frescos, técnica usada en otro siglo, como la capilla Sixtina, algo muy difícil de explicar con el eco y un péndulo en el medio que dicen predice temblores! Es altamente recomendada para visitar! Siempre hay gente para que te haga un tour y te cuente de la vida de este brillante hombre. Si no tenes auto igual poder llegar fácilmente, te tomas desde córdoba un colectivo a unquillo, llegando ahí esperas los interurbano que te lleva a cabana, caminas unas 7 cuadras en subida y listo! No hay escusas a disfrutar de las sierras y sus maravillas

Misteriosa y solemne la estructura ojival de la capilla de Buffo se levanta cercada del paisaje serrano de Candonga, en medio de la reserva natural Los Quebrachitos. Un halo de fantasía envuelve al lugar con insertos metálicos en el suelo, la magistral cúpula y el pedndulo de Galileo. Con una acústica única y sus muros pintados por artista Guido Buffo resguardan lo que se dicen la tumbas de su familia, esposa e hijas. Pasando por Unquillo como yendo para Río Ceballos, tomás a mano izquierda camino de tierra y aproximadamente 5 km luego llegas al arroyo en el que podes disfrutar de un tarde de pan casero o tortilla con chicharrón comprados, en el camino y unos ricos mates con algún yuyito que crecen silvestres en la zona.
La visita a la capilla no toma mucho ya que su diámetro es pequeño pero si sos, de esos locos lindos que van a recargarse de energías posiblemente tomes un poco más de tiempo. A media hora de la capital es un refugio ideal para huir unas horas de la «horneante» ciudad.

La capilla de Guido Buffo es una de esas construcciones que difícilmente se puedan explicar con algunas palabras, lo intentaremos.
El predio contaba hace mucho con la capilla que construirlo Guido Buffo para su mujer y su hija muertas por enfermedades casi fulminantes.
Tiene un increíble interior que tenes que conocer y que representa entre otras cosas el cielo, con sus planetas, un péndulo enorme colgando desde el centro exacto del techo con una extraña forma y una permanente sensación que no estas solo.
Nunca lo estas.
Ya que se dice que todos fueron enterrados en el predio.
Por otro lado, también habían dormitorios para eventos escolares, una gran cocina para campamentos y un buen campo para realizar tareas al aire libre.
Todavía tengo claros recuerdos de haber ido con mi colegio secundario.

Si te das una vuelta por Unquillo, es garantía que vas a respirar no sólo el aire puro de las sierras. También el aire del arte, la cultura y la historia. Y desde ya te digo, uno de los lugares que no podés dejar de visitar, es la Casa Museo Buffo.
Ubicada a siete kilómetros de Unquillo, inmersa entre las sierras cordobesas, te recibe con una corriente de agua en su frente que te invita a sentarte antes que nada a tomar unos mates. Después, el recorrido del lugar. El mismo, lo podés hacer entre las 10 de la mañana y las seis de la tarde.
Ahora te digo, si no te conmovés con la historia que esconde esta casa y la capilla, si te vas sin admirar al poeta, científico y pintor responsable de todo esto, la verdad no entiendo nada.
Pero mejor te das una vuelta y te enterás de todo in situ. Lo que vas a conocer, es la capilla, construida por el mismísimo Buffo en honor a su amada esposa. En su interior, si te gusta el misticismo, encontraste tu lugar en el mundo. Las pinturas de la cúpula, los astros, el universo, las estrellas, por más descreído que seas, te van a dejar con la boca abierta. Después vas a recorrer la casa y te prometo que allá las guías, te van a hacer conocer la admirable vida de Buffo sin que pierdas detalle.