Las buenas fondas traen recuerdos de casa. Mis anhelos de comida de fonda se vuelven descomunales cuando siento que no he comido nada bien o cuando no tengo tiempo ni para hacerme un agua de limón. En tiempos así, Doña Guille nos consiente. Doña Guille ha adoptado a quién sabe cuántos estudiantes en Cholula. Cuando como ahí, llegan a saludarla con cariño después de años de estar fuera de Cholula. Algunos, incluso, le mandan regalos desde lejos. Yo conozco a un hijo adoptivo de Doña Guille: le avisa por celular cuando prepara su comida favorita, recuerda que no come cebolla ni ajonjolí en las enmoladas, le hace tortas a deshoras, y lo regaña de vez en cuando por no cuidarse o no visitarla en mucho tiempo(es un regaño con sonrisa que me enternece cada vez). Le tengo especial cariño a la cocina de Doña Guille y la recomiendo a todo recién llegado a estos rumbos.
Ana M.
Rating des Ortes: 5 Puebla, México
Doña Guille es como la mamá postiza de decenas de estudiantes de la Universidad de las Américas Puebla. Así la conocí yo, cuando estudiaba en la Universidad y necesitaba una comida casera barata y, sobre todo, la calidez de Doña Guille. A sólo unas cuadras de la UDLAP, se encuentra La cocina de Guille, que en realidad es una adaptación en el garaje de su casa, en donde construyó una cocina y colocó unas 6 mesas medianas para ofrecer comidas corridas a sus ahora muchos clientes. Para mí, siempre es un gusto ir a comer ahí, por su buen sazón y por su calidez humana. Aunque también hay que considerar que si no te acabas la comida del plato, puede ser que recibas un cariñoso regaño de Doña Guille!