Zona Uno

Un lugar agradable, de los cuatro que se encuentran distribuidos en el centro histórico de Guadalajara. La cerveza es barata, y parece que cada uno tiene su ambiente propio. Uno es más bandero que otro, y éste es un poquito más rockerón. Aunque el sonido suele estar a todo lo que da.
Me agrada que hay la opción de otra cerveza local, la Real, que cuesta como 11 pesos la más barata, porque tienen de tres tipos. Cabe destacar que esta es una bebida oriunda de Guadalajara, aunque no tan artesanalmente trabajada como otras.
Cierran tarde y hay rockola, por lo que si un día andas con los cuates por aquí, vale la pena para caer a cotorrear (si no se llena mucho). Tienen entradas ligeras, para no quedarse con el estómago vacío.
Y personas de todo tipo vienen a cotorrear a este lugar y sus sucursales, lo que habla de su variedad.

Zona Uno no es por mucho uno de los mejores bares del centro de Guadalajara; el ambiente es un poco pesado, la música demasiado elevada, las meseras muy provocativas y bueno los comensales tampoco suelen ser gente muy fina.
No estoy diciendo que eso lo haga un mal bar, sólo que uno no puede llevar a la novia o a la familia a pasar un rato ahí, más bien es para ir con varios amigos y echar relajo. La cerveza eso sí está muy barata .
El servicio también es un poco malo y puedes invitarle una cerveza a la mesera por debajo del agua;

El David andaba muy animoso por caerle a este bar, pero toda la banda se oponía, porque decían que era bien chaca y estaba en una zona no muy grata para los turistas (que nosotros siempre parecemos ser, bueno ellos, porque yo sí soy).
El chiste es que terminamos aquí, un lugar rarísimo lleno de cincuentones, con muchas vestidas más que a la Hooters, bien aventadas con cada chela que te traían.
Eso sí, cosa que nadie puede atreverse a reprocharle al David es que la los tragos están baratísimos, salvo que traigas otras intenciones. Después de un rato entendí por qué ese díà la consigna había sido que las niñas no vinieran, aunque en realiad también había mucha chavaruca y ruca a secas poblando el sitio.
Volvería sólo por el precio de la chela, pero la neta sí me dio un poquito de miedo y desconfianza andar rondando esta zona de la ciudad.

Zona Uno es una buena cervecería para pasar el rato con tus amigos, digo un rato porque en lo personal no me late tanto salir tan noche de ahí, ya que mucha gente te pide dinero, hay algunas chicas que les gusta la vida loca jaja, y pues también como en muchas partes de la ciudad, lamentablemente te asaltan, el problema es que por ahí sí está muy solo.
Sin embargo, el lugar no está tan mal, pues siempre hay ambiente y tienen buenas cervezas y botanas. Lo raro es que mas adelante hay otro lugar igual, se llama Zona Uno y parece ser que es de los mismos dueños, pero sinceramente no sé por qué hacen dos sucursales en la misma calle, eso sí, uno más grande que el otro.

Cuentan que en esa esquina, estuvo una de las cantinas mas antiguas de la ciudad. Duro una grandísima cantidad de años, pero con el paso del tiempo y después de muchos negocios, termino en este llamado Zona Uno.
Un bar cuyo ambiente da una vista a la calle, no tiene muros y lo hace hasta cierto punto, muy particular.
2 cosas que no me dejaron con michas ganas de volver. La música esta muy elevada en sonido y la atención no es del todo buena.
Valdríà la pena regresar solo por el significado del lugar y la famosa esquina.

Este es uno de los lugares que algunos nos cuesta admitir que visitamos pero la verdad es que he ido en varias ocasiones y cada una es una experiencia chusca que contar.
El lugar está ubicado en el centro de la ciudad, hay 2 en la misma calle pero este es el más grandecito. Es atendido por chavas con ropa un tanto provocadora a las cuales les puedes invitar una cervecita por 70 pesos (ustedes ya saben masomenos por donde va esto)
Aunque puedas invitarle una bebida a la dama y cualquiera pueda dar esa clase de servicios discretos. La verdad es que esto es algo que se maneja un poco debajo de la mesa pero se los comparto por si quieren aprovechar. El lugar no aparenta nada de este estilo, es un bar común y corriente donde van hombres y mujeres (en su mayoría señores)
La música es de rocola y la verdad es un poco elevada, dificulta mucho platicar. La cerveza vale unos 18 pesos aproximadamente (dependiendo la que pidas) y está interesante ir con tus amigos y ponerte a platicar con las meseras y echar relajo.