Almacenes Ánfora

Estaba haciendo tiempo para que le arreglaran unas cosas a mi bici y aproveché para dar vueltas y buscar en el centro ese hermoso refractario vitrocerámico que sólo he visto en mis sueños y en un catálogo que le regalaron a mi mamá D: Los vitrocerámicos son la ondísima, porque igual puedes ponerlo en horno de gas, de microondas, sobre la llama directa de la estufa o usarlo para congelar algo. Además luego se ponen guapas algunas marcas y les confeccionan de esas tapas plásticas hermeticosas: te ahorras andar ensuciando y cambiando de trastes a la hora de guardar lo que ya cocinaste.
Lamentablemente esta tienda no los tiene tampoco D’: Pero igual paseé por el resto de la tienda para ver qué cosas maravillosas encontraba aquí y síiii: encontré en $ 19 pesos estos topers-​bowlcitos que amo. No son ni pyrex. No aguantan el horno de gas ni el fuego directo, pero sí aguantan micro y congelador. Sus tapas aunque no son herméticas sí hacen un super paro para no tener que lavar mil cosas. Si la salsita no se acabó, le pones la tapa y así se va de la mesa al refri.
También había maravillosos exprimidores/​machacadores de ajo (uno de ellos hecho en México, yey!), y caaantidad de electrodomésticos a buen precio (aunque yo no diría que era el mejor precio).

Debo de confesar que soy fan de la cocina, aunque nunca he podido tomar algún curso o clases para poder aprender platillos más elaborados o postres, por lo que se imaginarán como me pongo cada vez que visito este lugar, y es que con solo ver todo lo que ofrecen, me dan más ganas de aprender más sobre la cocina y de tener una cocina enorme para poder hacer muchos platillos exquisitos.
El gusto lo tengo debido a que mi madre desde pequeño nos enseñó a cocinar, y debido a que un tiempo estuve viviendo solo en otra ciudad, pues el gusto por cocinar fue creciendo; es casi imposible ingresar a comprar solamente una cosa, pues conforme vas viendo todo lo que hay y los precios terminas llevándote más de lo que tenías planeado. No solamente ofrecen artículos para cocinar, también venden vajillas, vasos, copas, cubiertos en diferentes tamaños y diseños, todos son tan bonitos que no sabrás cual llevar a tu hogar.
Postres, pastas, pizzas, carnes, ensaladas, cualquier comida que se te ocurra hacer y te haga falta algún utensilio, ven, seguramente aquí lo encontrarás a un precio económico, pero sobre todo el material del que están hechos son de muy buena calidad. A diferencia de la mayoría de los lugares que cuando entras tienes a alguien siguiéndote como si te fueras a robar algo, aquí te dejan pasear libremente y elegir lo que desees, aunque claro, si tienes alguna duda sobre qué utensilio te servirá mejor no dudes en preguntar, pues las personas que te atienden siempre lo harán de una buena manera y te podrán orientar para evitar que compres algo que no te vaya a servir.

Mi sueño en este momento de mi vida: una cocina súper equipada con todos los utensilios habidos y por haber en ella. Lo de la cocina pues ya más o menos estoy presupuestando para que en un plazo mediano yo pueda tenerla; y lo de los utensilios poco a poco lo iré logrando con mis visitas a este lugar.
Y es que mi abue me enseñaba que se conquista a las personas por el estómago, entonces a mí me encanta colonizar gente porque tengo una chef atrapada en mí que me pide a gritos visitar una y otra vez almacenes Ánfora.
Lo último que mi chef reprimida quiso experimentar es la panadería y las pizzas, por lo que era de vida o muerte encontrar un rodillo para amasar y un cortador de pizzas; pero sintiendo unos aires de grandeza decidí adquirir unas charolas, cortadores, cucharas y hasta unos moldes para que se vean muy nice mis panecitos.
Y es que cada vez que entro a cualquier sucursal de Ánfora, me siento en el paraíso, sueño con tener cada cosa ahí exhibida en mi cocina súper wow, y aunque sus precios son muy económicos en comparación con otras tiendas similares, ir ahí es saber que en algo tendré que reprimirme en la semana porque gasté demás, y no por lo caro, sino porque es inevitable comprar sólo un cosa.

Mi chica tiene alma de chef, y a mí me encanta comer, así que compartimos el gusto de hacer compras en Almacenes Ánfora.
Actualmente ella está incursionando en la repostería fina, así que los moldes para panecillos y otros utensilios que sirven para decorar pasteles y cupcakes, fueron lo último que compramos ahí.
No está de más decir que hemos buscado en otros lugares, y aunque en algunos productos el precio no varía mucho, hay otros en los que la diferencia es muy obvia, aunque sean de la misma calidad.
Este lugar tiene tantas cosas que aún si solamente vas por una cuchara, terminas comprando otras cosas que no sabías que necesitabas con extrema urgencia hasta que las encontraste ahí.
Me gusta que los empleados no te acosan, te dejan mirar el tiempo que necesites, y al contrario, si les pides apoyo, con gusto te asesoran o te orientan para encontrar lo estés buscando.