Las grandes ligas de restaurantes japoneses subieron fuertemente sus estándares cuando apareció Aoki en Mérida. En este restaurante nipón no encontrarás rollos de con Doritos o alitas buffalo, es mucho más apegado a la tradicional comida de Japón, de hecho no te recomiendo sus rollos, que sí están buenos pero lo interesante de este lugar son los platillos. Entre los platillos que más me han gustado está el Sunomono, una combinación de mariscos montados sobre una vinagreta de pepino y pasta harusame, o el Yakimeshi, arroz con cerduras y huevo que puedes pedir con pollo, res o pulpo. Su Udon es buenísimo, son tallarines gruesos con verduras tempura. De postre tienes que probar su helado tempura, es de vainilla, tiene la capa de tempura y lo bañan en fresca, cajeta o chocolate. Ahora que si quieres probar muchas cosas puedes pedir el Aoki Teishoku que tiene un poquito de todo, tiene sashimi mixto, suno mono, tempura mixto, tonkatsu, ensalada, arroz, sopa y postre
Ana R.
Rating des Ortes: 4 Mérida, México
Este lugarcito apenas hace un par de meses lo descubrí, cuando una amiga que hacía tiempo no veía, me invitó a conocerlo. El acceso al local es por un pequeño pasillo que después se abre hacia el área de comensales. Las mesas son mitad sillones fijos, mitad sillas movibles, de modo que puedes elegir según tu preferencia de asiento. La atención de los chicos es muy buena, y la variedad en el menú sorprende. Además de rollos de sushi, arroz gohan, yakimeshi y las tradicionales entradas de hongos con queso, este lugar ofrece verdaderos platillos de cocina tradicional japonesa, como el Aoki Teishoku o el Yasaitame. Verduras, germinados y carnes en diferentes combinaciones y con salsas que van acentuando los sabores. Entre las opciones de bebida, están las limonadas y naranjadas rellenables, por si tu sed no se acaba con una sola servida. El sabor de los platillos es muy bueno, y es un lugar muy cómodo para hacer la sobremesa y quedarse platicando a gusto. Después de nuestra comida, mi amiga y yo estuvimos un par de horas platicando y no tuvimos ninguna presión del personal que nos atendía por apurarnos a desocupar la mesa. Eso siempre se agradece.