Dulcería y Sorbetería Colón sucursal Montejo

Todo un clásico en Mérida. Si no has tomado un sorbete aquí no has estado en la Ciudad Blanca. El sabor que pidas, riquísimo.

Muy buen lugar para refrescarse, en un excelente ubicación de esta gran ciudad, no dejen de pasar,

Cuando alguien llega a Mérida uno de los primeros lugares que debe conocer y la primera recomendación de los que vivimos aquí debe ser sin duda esta heladería, así me pasó a mí, mis familiares me hablaban tan bien de ella que a la primera oportunidad que tuve fui a probar los helados.
Si quieres degustar de unos buenos helados, con sabores deliciosos, este es el lugar ideal para hacerlo, pero yo te recomiendo el de guanábana porque se siente el sabor de la fruta en su máximo esplendor, es exquisito. Pero algo más exquisito son los dulces, durante todos estos años he probado todos me declaro un ferviente seguidor, principalmente de los merengues (me gusta el dulce muy dulce).
En ocasiones cuando tengo algo de dinero paso a cualquiera de las sucursales sólo para comprarlos, pero sinceramente recomiendo ir a esta en especial, es mejor pasar el rato comiendo un helado aquí cuando se está con los amigos o con esa persona especial, el lugar se presta para la convivencia gracias a la tranquilidad que se vive en la zona.

Soy súper mega ultra fan del coco, soy de los que prueba de todo lo que se hace con él, sobre todo si es dulce o frío, como los helados y no hay ningún lugar que los haga mejor que la «Sorbetería Colón», muchos lo intentan, fracasan o salen victoriosos, pero ninguno ha logrado superarlos. He dicho.
Exagero un poco, pero la verdad es que esta heladería y dulcería es otro de los lugares con tradición en nuestro estado, gracias a la calidad. Es que todo está delicioso, en lo personal me fascina la champola de coco, el sabor sobresaliente del coco, más leche es lo mejor del mundo, lamentablemente ya no las hacen mucho, pero si por alguna razón lo ves en su menú ¡tienes que probarlo! Y avísame, no seas gandalla.
Pero cualquiera de los sabores, en la presentación de sea (helado o champolas) tiene lo suyo, depende del gusto de cada quien, sobre todo son servidos con generosidad y acompañado de un vaso de agua y ¡aguas! Pero al parecer no es purificada, habrá a algunos a quien no le importa (como a mí), pero si no te quieres arriesgar toma precauciones.
La ventaja de esta sucursal es que se respira un aire más bohemio, tranquilo, sin prisa a diferencia de la sucursal Centro o la de Gran Plaza, más que nada porque las aceras son menos transitadas, pero eso sí, se encuentra ubicado sobre una de las calles con más flujo vehicular.
Punto aparte son los dulces ¡irresistibles! Te seré honesto, vas a tener que ir varias veces porque si pruebas más de tres en una sola visita te verás como un glotón, mejor tómalo con calma, de poco a poco y así tienes un pretexto para volver y comprar más. Te recomiendo el pan envinado.

A mi nadie me va a desmentir sobre esto: el sorbete de coco de Colón es el mejor del mundo. Ni que venga el heladero más longevo y experimentado del mundo a darme a probar de sus delicias, me podrán quitar esa idea de la cabeza.
Sorbetería Colón de Paseo de Montejo es el lugar ideal para llevar a tus amigos que vienen de visita por la ciudad y quieren endulzarse el paladar, dedicarse a contemplar, ver los coches y la gente pasar, mientras disfrutan de un fresco atardecer meridano.
Este lugar es perfecto para ir con amigos, en pareja, en modo guía de turistas, en familia… De cualquier modo te la pasarás a gusto en Colón.
Una tradición que distingue este lugar es que cuando te sirven tu copa con el sabor de tu preferencia, esta siempre va acompañada de un vaso con agua. Yo estoy segura de que es agua de la llave, y honestamente no sé si tengan un proceso de purificación de la misma, pero eso es lo de menos, si fuiste a Colón y no probaste el agua que te sirven para acompañar, es casi como que no hubieras ido. Además, son tan dulces y cremosos que vas a necesitar de ese vaso de agua, créeme.
Además del sorbete de coco, venden otros sabores deliciosos. No dejes de probar el sorbete de naranja, y cuando es temporada, definitivamente tienes que ir por uno de pitahaya.

No hay sorbetería con más tradición que «Colon», su gran sabor a conquistado Mérida desde hace generaciones, hoy con varias sucursales repartidas por la ciudad. Todo Mérida conoce esta sorbetería y es de elección no solo para los jóvenes sino para sus padres e incluso abuelos, todos ellos han disfrutado de su sabor.
Sus sorbetes se basan en recetas originales y muy tradicionales, todas ellas hechas de fruta y demás ingredientes que destacan por su gran sabor, si tuviera que elegir uno, sería el de coco, definitivamente. Además de los sorbetes cuentan con venta de postres, de los cuales adoro el pionono, dulce, suave, cremoso por arriba, un regalo para las papilas gustativas. Otro producto de los favoritos son las champolas, si, esas de sorbete, leche y vainilla, deliciosas, la mía de coco, por supuesto.
Hay que tomar en cuenta que esta sucursal no cuenta con estacionamiento y descansa sobre la transitada avenida Paseo de Montejo, así que hay que arreglárselas para estacionar el carro.
Si eres de Mérida no hace falta que te diga que es un lugar lleno de tradición y de deliciosos productos; y si eres de fuera es uno de esos lugares que no puedes dejar pasar.

Toda una tradición en Mérida, si eres Meridano seguramente por lo menos una vez en tu vida has ido, si eres foráneo seguro que te lo recomendaron y si nos visas escucharas mucho de esta dulcería y sorbetería.
Tiene tantos años esta heladería que muchos de nuestros abuelitos pide helados o postres de ahí. y no para menos, si están riquísimos. Es tradición de padres a hijos llevarte por un helado del lugar y con eso de que la Biciruta pasa por ahí los Domingos, pues es inevitable que después de hacer algo de ejercicio se te antoje algo refrescante como un helado.
Esta bien que sea una tradición y traten de conservar el lugar lo más típico posible de cómo era antes pero la verdad es que le falta remodelación; en una ocasión e vi en la necesidad de entrar al baño, no se los recomiendo, le falta que le den su «manita de gato» y más limpieza. Por el mantenimiento del lugar y por el sabor del agua (a agua de llave) le doy 4 estrellas y no 5; en serio, ya hay muchas marcas de agua purificada de varios precios, comprenla porque ni por más que la den fría cambia el sabor, hasta los niños se dan cuenta que el agua que dan no tiene buen sabor.

Es una dulcería y sorbeteria, muy conocida por los yucatecos ya que es una empresa familiar que tiene más de cien años existiendo. Hay sucursales en paseo de Montejo, plaza dorara y la gran plaza, pero la tienda principal se encuentra frente a la plaza grande ubicada en el centro de Mérida.
En lo personal la mejor sucursal en la de paseo de Montejo por la vista. Tienen un servicio un poco lento.
En cuanto a los helados son únicos, los preparan cien por ciento naturales. Hay postres, champolas, sorbetes. A mí me gustan mucho las champolas, pero todo es muy bueno.
Todas las sucursales mantienen el mismo estilo clásico y antiguo con el que empezaron, en 1907, lo cual es ya una tradición para muchos de los yucatecos, ir por un helado cuando salimos a pasear, siempre se antoja y más con tanto calor.
Lo que los mantienen con tantos clientes es que son de muy buena calidad.
Los precios son buenos, no siempre preparan todos los diferentes tipos de sabores pero eso varia por las temporadas en las que se den los frutos.
Vale la pena conocerlo ya que es ya una tradición en Mérida.

Estoy seguro que cualquier empresa que haya durado más de 100 años algo está haciendo bien, ¿Qué no? Son SORBETEs, no helados, 100% yucatecos.
Un restaurante de tradición familiar, ha ofrecido helados o sorbetes de frutas tropicales con recetas originales.
También ofrecen pastelillos ya sean tradicionales yucatecos o pasteles normales. Además venden champolas que es una bebida hecha de leche con helado del sabor que usted desee las más conocidas son las de chocolate, coco, y guanábana.
Tienes que probar una, sólo para decir que ya tomaste una champola y te digan tus amigos: ¡Oh Dios, qué cool eres!
¿Cómo que cuál es mi favorito? COCO. coco o nada.
Te recomiendo ir con varias personas para pedir de todo una vez y luego regresar con tu favorito en mente.

Helados Colón es parte de la tradición Yucateca ya que lleva ofreciendo sus deliciosos sorbetes y champolas a todos aquellos que estén recorriendo Prolongación Montejo.
Yo normalmente voy los Domingos en la noche con mi familia (Todos somos fans). El estacionamiento es un poco problemático ya que tienes que buscar algún lugarcillo sobre la avenida.
Cuando voy siempre pido mi sorbete y un borrachito (no te asustes, es un postre) un panecito dulce bañado de almíbar, esponjosos y jugosos. Dentro de mis sorbetes favoritos se encuentra el repertorio de: limón, mango, coco, mamey y chocolate. Igual las champolas de chocolate son deliciosas, como unas enormes malteadas.
Si terminas con la sensación de empalagamiento por tanto dulce puedes pedir un vaso de agua, pero ojo: el agua es de la llave, entonces si eres medio especial con lo que tomas abstente de pedirla.

Uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad, sorbetería Colón es uno de los establecimientos más antiguos y con más arraigo. Fue fundada en 1907 y a la fecha siguen conservando sus tradicionales recetas.
Elaboran deliciosos pastelitos dulces, refrescantes champolas y sorbetes o helados, todos ellos preparados con frutas tropicales.
El lugar te ofrece la oportunidad de pasar un rato agradable en compañía de familiares o amigos y disfrutar del día después de una caminata por una de las calles más visitadas de la ciudad.
Esta sucursal de Paseo Montejo tiene mucho flujo de visitantes y turistas aunque en mi experiencia el servicio no es muy bueno, los meseros no están pendientes de los clientes y en ocasiones llegan a ser groseros, aún si no debes dejar de visitar esta histórica dulcería.

Heladerías Colón.
Este lugar es ya un referente en la cultura yucateca. Es un lugar llamativo tanto por su ubicación como por su decoración. Es un de esos lugares clásicos que todos citan a la hora de recomendar un lugar al cual asistir.
Primero hay que mencionar su servicio el cual es bueno, te atienden rápido y eficiente. Al finalizar tu postre igual te sirven un poco de agua para bajar lo dulce del sabor de sus productos. Lo cual me lleva a ese punto. El sabor no es de lo mejor a mi parecer, muchos de sus helados tienen un sabor demasiado dulce. Pero sus troles y dulces de merengue son buenos.
La consistencia es igual una cosa que merece mención, es un poco espeso y áspero el helado que sirven. Las instalaciones, al menos las de paseo de Montejo están cómodas pero sufren de exceso de vendedores ambulantes.
Personalmente considero a los Helados Colón como un punto al cual hay que ir una vez, aunque no te gusten sus helados porque es como un rito de paso el vivir en Mérida e ir a Colón.

Esta es una parada obligatoria ya sea que vivas en Mérida o estés de visita, los helados Colon son una tradición en Yucatán, como su nombre lo dice se especializan en helados, en su mayoría sabores típicos de Yucatán, podemos encontrar helados de mamey, nance, guanabana, mango y los clásicos, chocolate, vainilla, crema morisca, entre otros.
Otra de sus especialidades son las Champolas (son bolas de helado en una copa, disueltas con leche y leche condensada, a tipo de malteada). Estas hay en todos los sabores, cuanto helados haya y es una tradición tomar tu champola acompañada de dulces típicos yucatecos, como rollitos rellenos de crema española, rollos de chocolate, chux (harina horneada rellena de crema española) y los clásicos merengues.
En el caso de la sucursal montejo es toda una experiencia, ya que mientras disfrutas de tu helado o champola, admiras la belleza del paseo de montejo, el lugar cuenta con sillas y mesas para disfrutar, solo o acompañado de estas delicias.

Parada obligatoria si vienes de fuera o simplemente si tienes antojo de algo dulce y delicioso y para matar el calor. La dulcería y sorbeteria Colón es ya una tradición yucateca, sus famosas champolas, sus helados y sus dulces y postres son lo que marca la diferencia entre este y los demás.
Mi favorito, el sorbete de durazno. Es dulce, un poco ácido y se deshace en la boca. Otra sugerencia es la champola de mamey, si no lo conoces, el mamey es una fruta de temporada que se cosecha en la zona de la península, es dulce, cremoso y tiene un sabor muy peculiar, es delicioso.
Al ordenar un helado te lo van a entregar en una copita en su particular forma de cono invertido, y te van a dar un vaso de agua filtrada. Para las personas que no confían en el agua mexicana, esta está tratada y es completamente sano tomarla, si no confían, venden botellas de agua.
Ahora, si se te antoja algo menos frío, también tienen una muy amplia selección de dulces y postres de excelente calidad y deliciosos. Los precios no son tan bajos, pero por la calidad, de verdad vale la pena.
Simplemente estar en el corazón de nuestra ciudad, admirando la hermosa avenida de paseo de Montejo, y después de disfrutar de tu helado, ir a caminar unos minutos por la ciudad y admirar las casonas y todo lo que esta calle tiene para ofrecerte, eso es lo que en verdad hace que esta visita valga totalmente la pena.

Me encanta el helado de coco, aunque debo decir que el de la sorbetería Colón no es mi favorito. Siento el sabor exageradamente dulce, sin embargo, las champolas de fresa y los helados de mamey o de mango están buenísimos.
Para un dominguito en familia está muy bien, esta sucursal es la que más me gusta por encima de la de la sucursal del Centro. Está sobre paseo de Montejo, una de las avenidas más importantes de la ciudad y llamada así, por Francisco de Montejo, fundador de la ciudad de Mérida.
Si vienes de paseo a Mérida, súper recomendable tomar un helado para empezar a caminar sobre esta avenida en la tarde o bien, solo para tomar el fresco de la noche.
El servicio de los meseros no es excelente, solamente cumplen con llevarte tu helado y llevarse el vaso terminado, nada más. Y si te descuidas ni se esperan a que termines, ya me pasó una vez.
Tip, al final te dan un vaso de agua, yo nunca me la tomo, prefiero llevar mi botellita.
En fin, ésta sorbetería es de una tradición muy importante en Mérida, tiene mucha presencia entre los yucatecos y extranjeros, que vale la pena conocer.

De las cosas más yucatecas que hay es irse por un helado un domingo en la tarde; es de las tradiciones modernas de las familias de Mérida. Los domingos y sábados desde el medio día está cañón encontrar una mesa disponible.
Los sorbetes son de sabores naturales, coco (el clásico y favorito), mango, fresa, limón, guanábana, melón, elote, chocolate, vainilla, pitaya (en temporada)…
Está rica la situación: mesas al exterior, el vientito, la tarde y tu helado. A mi parecer este lugar vende más la situación que el helado, que no es para morirse. También parece ser ya tradicional la cara áspera que tienen los meseros que me han atendido, que muchas veces sólo se paran frente a uno sin más, a esperar que empieces a hablar para tomar tu orden. No es que sean groseros, simplemente no tienen algunos gestos que suelen tener esos meseros que se quieren ganar su propina.
Y bueno, un dato: Puedes comprar una porción individual, o comprar para llevar en litros o medios litros.