Esta parrila argentina tiene la partcularidad de ser propiedad, no de argentinos, sino de mexicanos. Sin embargo, los cortes que sirven sí son de la calidad de un buen restaurante pampero. Es ideal para pasar ahí las tardes de cualquier fin de semana, aunque hay que añadir que el lugar es pequeño, las mesas espaciosas y, or lo tanto, es muy común que no encuentres lugar y tengas que esperar por uno. Además, debido todo esto, también debes de ir preparado para que, cuando estés sentado, tengas que lidiar ujn poco con el movimiento de los meseros o con tus compañeros de mesa para estar cómodo. Te recomiendo que, para empezar, pidas empenadas de carne y queso que son deliciosas. También, antes de iniciar con los platos fuertes, el jugo de carne es extraordinario. Y ya que tengas que elegir un corte, yo te sugiero que pruebas la arrachera. Aunque, si vas en compañía de al menos tres personas más, la parrilla a fuego lento es tu mejor opción, pues trae muy benas porciones arrachera, chistorra, longaniza y chorizo. Para finalizar, tanto las ensaladas como los postres(sobre todo el flan), son de altísima calidad. Ideal para ver el futol o el americano con tus amigos o familiares un domingo por la tarde.
Emmanuel Alejandro J.
Rating des Ortes: 3 Mexico City, México
Es un restaurante de cortes argentinos que se podría pensar que es como muchos, pero la verdad es que no. Éste restaurante sólo tiene de argentino la denominación, ya que el dueño y los empleados son más chilangos que la torta de tamal, además los sabores son bastante comunes en nuestro paladar. Los cortes son muy buenos pero lo más atrayente del restaurante(que por cierto es lo más sencillo) son las tostadas(hechas a la leña) con crema ácida y frijoles de la hoya. El servicio es muy bueno, aunque cuando tienen mucha gente se entorpece un poco. El lugar se ve muy limpio y está ambientado(como muchos) con camisetas de futbolistas firmados por los mismos. Algo muy atrayente del restaurante es su asador que está a un lado de la banqueta(de una forma muy higiénica) y cuando pasas por el lugar te inunda el olor a carne y de vez en cuando a tortillas quemadas, cuando al cocinero se le olvida sacarlas del fuego.