Dulces y Helados Don Tere

No había acto más satisfactorio luego de terminar la cascarita en el parque, que ir por uno de los suculentos chicharrones preparados: con jitomate, aguacate, col, abundantes cueritos, un montón de salsa y un toque de sal y limón.
Pero el señor no sólo vende chicharrones. También vende de esos pequeños caramelos que parece, han quedado poco a poco en el olvido: paletas de reloj, de semáforo, picafresas, entre otras delicias de la confitería industrial.
Los helados son simples. Refrescantes, pero sin duda la especialidad del puesto son los ya mencionados chicharrones preparados.

Este pequeño puesto callejero de dulces y botanas tiene más de 45 años colocándose en una de las banquetas del Parque Corpus Christi de la Colonia Guadalupe Tepeyac todos los días de la semana. Lo sé muy bien porque diario acostumbro cruzar por este lugar y de vez en cuando comprar algún caramelo o un chicharrón preparado con cueritos, aguacate, jitomate, salsa y limón.
Todo mundo lo conoce como los dulces de Don Tere, el señor que por lo regular atiende, aunque en realidad es toda su familia quien lo hace, esposa, hijos y nietos.
En sábado y domingo también acostumbran llevar un carrito de helados servidos en barquillo, por cierto muy ricos, aunque algo caros.
Si llevas a jugar a tus hijos al parque seguro es que te detengas en este puesto, tus niños te pedirán que les compres algún dulce o tal vez una de las pelotas u otras chucherías que aquí mismo puedes encontrar.