En años recientes todo el mundo quiere hacer«rescates» de la cocina mexicana(lo que sea que eso signifique). Montan un lugar con mantelitos de papel de estraza, hacen recetas de escamoles con quesito de cabra y venden mezcales corrientones a 200 pesos el shot. Gracias, chavos, sin ustedes nuestros fogones están perdidos. Si usted tiene ganas de ser uno de esos héroes rescatadores le sugiero que primero vaya al Bajío, pida una jarra de agua fresca y espere a que lleguen las tostadas a su mesa, pruebe las salsas y después de eso déjese de taradeces. Porque, la cocina mexicana no necesita un paladín que descubra el santo grial y sí requiere de lugares como este, donde las recetas de los pueblos y las cocinas de las familias se ejecutan a la perfección. ¿Quiere llorar de la emoción? Cómase una gordita petrolera, aunque sus congéneres rescatadores lo vean feo por no ser una receta vegetariana libre de gluten inspirada en un performance de la Avenida Álvaro Obregón. Toda la carta no tiene desperdicio, las sopas son como si un querubin le ejecutara un masaje genital y los especiales que se rotan constantemente valen la pena visitarlo cada que sea posibles. O, puede dejarse de niñerías y pedir carnitas. Todos vamos a morir un día, y qué mejor que sea a causa de disfrutar los músculos y las entrañas del noble marrano.
Alejandro F.
Rating des Ortes: 5 Mexico City, México
Este restaurante ha cobrado buena fama de unos años para acá, lo que le ha permitido abrir sucursales en diversos puntos de la ciudad, sin embargo, no hay nada como visitar el lugar donde se originó todo. La casa matriz de El Bajío cuenta con la supervisión personal de «Titita», mujer que se ha esforzado por mantener el toque tradicional de la comida mexicana en cada uno de los platillos que aquí se pueden degustar, y vaya que lo ha logrado. Durante el desayuno no pueden perderse de unas gorditas infladas con piloncillo ni el tamal pulacle papanteco, y en la comida no hay nada como el caldo xóchitl. Aunque si quieren probar el alma del lugar, TIENEN que pedir las típicas carnitas que aquí se preparan ¡de lo mejor en el DF! Aguas, hay que tomar en cuenta que cierra temprano, a las 7 de la noche, aunque a las 8 de la mañana ya está abierto. ¿El dato curioso? Juan Gabriel solía visitar el lugar cuando BMG se encontraba cruzando la avenida.