La Terminal

Si tienes hambre, deseas algo rico, que te llene, pero infortunadamente tienes poco dinero, este lugar es como caído del cielo, con un sazón de remembranza en nuestras tradiciones y u a atención de lo más amable, este lugar llamó a mi atención, no sólo como un escape para aquellos días de escaso presupuesto y de evidente necesidad alimenticia, sino que también como un aliciente a una visita casi semana en la que se que mi opción me satisfará y además será amigable con mi presupuesto dejándome la opción de poder consentir me con más compras.
La atención es como dije muy amigable, quizá rayando el camaradería, muy veloz tanto de parte de quien atiende como de parte de quien cocina.
El sazón muy rico y la limpieza visiblemente satisfactoria.