Cafe de la Parroquia

Good breakfast spot. Staff is friendly and attentive. Large menu with American favorites like pancakes and French toast to huevos rancheros and huevos a la Mexicana. CASH ONLY.

Very pretty spot with friendly service. My breakfast of refried beans and scrambled eggs tasted very good but looked like it had been extruded on to my plate. Not appetizing. Nevertheless it tasted fine.
There is an art to presentation that really can make a dish.

Este sitio es un clásico entre turistas y locales por igual, pues tiene ya muchos años abierto y está convenientemente ubicado a cuadra y media del jardín principal. Por la mañana encuentras los desayunos típicos: huevos en enemil presentaciones, hot cakes, chilaquiles, tamales, enchiladas, etcétera. Por la tarde y noche el menú se extiende más, pero se mantiene en la comida mexicana, aunque también hay pastas.
Ayer fui con unos amigos y pedí los famosos chilaquiles, que estaban ricos, pero tampoco eran nada para cortarse las venas. El lugar tiene dos zonas, la más grande de ellas un patio interior, que puede ser algo fría si la mañana está un poco fresca. Aquí no existen los típicos paquetes de desayuno, todo se cobra por separado, por lo que fácil te gastas 120 pesos en un platillo, un café y un jugo; un poco caro considerando que hay otros lugares cercanos que ofrecen lo mismo por 50 pesos menos.
El servicio es excelente y el ambiente del lugar es agradable; pero los fines de semana está bastante concurrido, así que si llegas por ahí de las 11 de la mañana, prepárate a esperar un rato –mismo que puedes aprovechar para ir al cajero por dinero si no traes efectivo, pues no aceptan tarjetas-.

Es una cafetería esencialmente para desayunos ubicada en San Miguel de Allende, lo especial de el Café de la parroquia es que la locación es un patio central de lo que era una casa y ahí se encuentran las mesas, lo cual le da un toque distinto ya que entra mucha luz al lugar y sientes que estas al air libre sin realmente estarlo. En este lugar tiene todo lo que se acostumbra a desayunar como omelettes, huevos estrellados, chilaquiles, fruta, etc. pero al final del desayuno lo que tienes que por ley tienes que probar es el pan dulce (conchas) acompañado de un café para finalizar. Es un lugar agradable para tomar las cosas con calma, eso si hay que llegar temprano ya que como a las 10 u 11 de la mañana suele estar bastante lleno y tendrás que esperar a que se desocupe una mesa lo que no siempre es rápido, buena alternativa para un desayuno tranquilo y normal.

El lugar es muy lindo. Tienen un patio al aire libre y también un salón cerrado. Es un lugar ideal para ir con un buen libro y sentarse horas a tomar el sol y leer con un buen café.
Si vas con niños la dueña, quien siempre anda por ahí, tiene un stock de jueguetitos para que se entretengan.
Tienen servicio de desayuno, comida y cena; mi hora preferida para ir es en las mañanas. Varios son los platillos que hay que probar: recomiendo comenzar con un chocolate caliente y un jugo verde, ambos deliciosos. Los tamales gratinados, chilaquiles y pan francés son muy buenos.
Los baños son un poco incomodos pues es un cuarto muy pequeño y son mixtos, así que puedes estarte lavando las manos mientras en el privado detrás de ti hay un señor haciendo lo propio…
Si planeas ir en sábado o domingo prepárate para esperar un buen rato. No aceptan tarjeta y no hay reservaciones.