Kokoa´s Crepas Japonesas

Muy ricas crepas, nada empalagosas…
Muy recomendable.
El lugar es muy acogedor y la gente que atiende en este establecimiento son muy amables.

Una agradable sorpresa para mi paladar fue lo que representó el haber descubierto las crepas japonesas, que nunca había probado en mi vida, de Kokoa’s en la Plaza China.
Con una propuesta diferente, Kokoa’s mezcla sabores orientales en sus crepas que se preparan con nieve de te verde y lychee, junto con ingredientes más clásicos como moras, fresas, caramelo y mucha crema batida.
Además de las crepas que, siguiendo la tradición, se sirven en forma de cono y deben ser devoradas a mordidas, el negocio tiene diversas bebidas como smoothies, frappes, y boba tea, uno de mis favoritos en toda la ciudad.
En mis visitas siempre ordeno una crepa con nieve de te verde acompañado por un boba tea de taro, una combinación que, además de deliciosa, me deja satisfecha y hasta me relaja, sobretodo en las tardes que se disfrutan a gusto en la plaza China.
Debo agregar que en ocasiones Kokoa’s se queda escaso de algunos ingredientes que entiendo que son difíciles de conseguir, pero con un poco de paciencia de nuestra parte y un esfuerzo de ellos por atender mejor al cliente, este negocio podrá brillar más.

¿Crepas japonesas? ¡Siii… bueno en realidad no sabría si decir que son japonesas japonesas, pero de que son algo diferentes a todas las demás, lo son.
Éstas cono-​crepas yo diría, son precisamente servidas de esa forma, bastante «generosas» y con los ingredientes correspondientes en el centro listas para disfrutarse.
Como es de esperarse, había opciones de dulces y saladas. Yo traía antojo un poco más como de postrecito, así que pedí una que llevaba queso crema, fresa, caramelo, galleta y yo confieso que ¡le agregué una bola de nieve encima! ¡Uff! No me juzguen seguramente ustedes hubieran hecho lo mismo cuando la persona que te atiende te «invita» a probarlo… Estaba muy bueno caray, para qué digo que no.
Mientras tanto mi novio pidió la pizza crepa, que no sé si se llamaba así pero bueno yo ya la bauticé. Llevaba queso, pepperoni y champiñones. ¡Mmm! Las dos nos costaron $ 50, aunque de mi gula de nieve, digo, de mi bola de nieve fueron $ 15 más.
Aunque si ésto no te suena a mucha novedad, ésto sí lo hará: en Kokoa’s tienen también ¡PASTELES DE CREPAS! Aún está en mi lista de pendientes probarlos pero mientras les puedo decir que mis ojos me decían que seguro estaban buenos. Los venden por rebanada así que pude ver, justo donde hacen el corte, como se ven capas y capas y capas de crepas que montadas unas sobre otras, forman el pastel. ¡Qué tal! El que vi en esa ocasión era sabor óreo, pero creo que también hacen cosas menos empalagosas y más frutales.
Ojalá algún día las puedan probar, y si van podrán ver también un espacio de una de las paredes del local lleno de post-​its de colores con recados que van dejando todos los clientes en sus visitas. Yo ya dejé el mío.

¿Ya notaron que de verdad compró todo lo que tenga que ver con la palabra «Oriental»?
Pues en esta ocasión, caí engatusada por la palabra «Kokoa´s Crepas japonesas». ¡Y Buda sabe! que estas sí son crepas japonesas de verdad. Nada de imitaciones.
Con chocolate, con helado, con fresas, combinadas, con lo que quieras, el menú abarca todos los gustos. Y el local, aunque es pequeño, tiene un ambiente que te inspira la ternura «kawaii» que te transportan al Tokyo contemporáneo, sentí mientras comía mi crepa de chocolate, que en cualquier momento iba a empezar a contestar mi teléfono tipo: «Hi! Mochi mochi, Teff-​chan desuu!», pero gracias a Dios eso no paso.
Lo que más me gusto del lugar, a parte del café que es cien por ciento de grano, preparado por un experto, que además es egresado de la carrera de cinematografía (muy buena plática), es que todo: desde la crema de chocolate hasta la crema batida, es preparada por la gente que trabaja en el restaurante. Simplemente increíble.
Hay combos, y productos individuales, son precios económicos, y comida deliciosa.