Tae Kwon Do Playas

Las artes marciales no son para mi. De pequeño apenas asistí a dos, mi pie plano me impedía sostenerme en esa posición donde flexionas las rodillas, subes la cadera como si estuvieras haciendo una sentadilla pero quedándote a la mitad y pones un pie adelante de otro para alcanzar equilibrio. En mi caso el equilibrio terminaba rompiéndose tropezando o rompiendo la postura, en casos extremos cayendo sobre el suelo tras una patada o golpe en el costado.
Después de mis malas experiencias me di tiempo de ver el entrenamiento de los chavitos en este lugar. La profesora me contó algo sobre horarios y cursos que ahora no recuerdo pero que te sugiero preguntar si llegas a ir a una clase de prueba para ti o tus hijos. Recomiendo que entrenen este tipo de disciplinas desde chavitos, es mucho mejor, que no me haya funcionado no quiere decir que no sean una buena opción para formarlos en valores y en el trabajo arduo que requiere convertirse en un taekwondoin de nivel.
Cabe destacar que aprender estas cosas sirve para darles confianza y seguridad a los niños y no dudo que surta el mismo efecto en adultos que también practican esta arte marcial. El espacio de entrenamiento en esta escuela es amplio, cuentan con equipo y buena instrucción. Piensa que está actividad es de las pocas en donde desarrollas sí el cuerpo pero también la mente y el espíritu. Provienen de una tradición oriental donde la fuerza y darle con todo a otro no son la prioridad, sino el auto conocimiento, la contención y el control de tu ser interior.