Este es uno de esos parques que debería tener toda ciudad que se precie. Lo bueno es que aquí palmeras nos sobran y que además quedan muy bonicas donde las pongas. Ya he estado dos veces por el mismo motivo, es un escenario precioso para hacer fotos, tiene muchos ambientes y la verdad es que se puede sacar una sesión preciosa. Hay lagos, cascadas, barquitas, palmeras, kioskos, bancos, escaleras… todo lo que quieras para pasar una tarde estupenda. En la zona del kiosko tienes la zona que«pertenece al kiosko» y una zona libre con mesas de madera para que te puedas llevar tu merienda y pasar un día allí de lo más molón haciendo un picnic.