Ay, ¡que pereza me da este sitio! Es… pura contradicción. A ver si me aclaro y os aclaro. Bien ubicado, pero si vas en coche, olvídate de aparcar. Buena y amplia terraza, pero en la esquina de Avenida Sarrià con París…un infierno de ruidos y coches. Interior agradable, pero mesas diminutas. Panes de todo tipo, pero caros.(Por cierto, aprovecho el momento: ¿a alguien le parece tan tonto como a mi, que algo cueste 91 ó 94 céntimos?. Digo yo que ¿no sería más sensato o 90, o 95?. Por el cambio lo digo, vaya.) Servicio correcto, pero las chicas no sirven en las mesas, o sea que… A todas horas platos preparados, ensaladas, croquetas, bocatas, si, pero a precio de restaurante. Todo tipo de cocas, buñuelos, pastelitos y demás, pero nada del otro jueves. Abierto hasta tarde, pero si vas al final del día, olvídate de la baguette. Y seguiría pero como seguro que entendéis lo que os digo… lo dejo ya. Me gusta. Y voy. Pero me da pereza!