El Castillo de las Pizzas

Buen sitio para comer pizzas, aunque en la carta hay de todo, mi recomendación es la pizza especial del castillo, la cantidad de queso es notable y el jamón recién cortado.
Las camareras por normal general trabajan muy bien a excepción de alguna que nos hizo esperar media hora para tomarnos nota.
La decoración tipo rústico hace de este sitio un lugar acogedor.
Los fines de semana en horas puntas cuesta aparcar y coger sitio en el local.

Posiblemente el mejor sitio de la provincia de Sevilla para comer las pizzas mas deliciosas que he probado. Sin dejar de mirar el bolsillo, ya que las pizzas no valen mas de 10 euros y vienen muy cargadas de todos los ingredientes. El trato directo, buenos profesionales y camareras trabajadoras. El jefe Juan muy atento cuando ya te reconoce como cliente habitual. No cambio estas pizzas por ninguna de otro sitio. Para otro tipo de publico tambien hay carnes, sandwiches, baguettes, serranitos. Una amplia carta con todo lo que necesitas, todo muy bien de precio y tamaño. Si vas, repites.

Conocía esta pizzería por referencias de amigos, pero aún no había ido… Hasta ayer. Me habían dado muy buena fama de de ser una pizzeria famosa que se llenaba siempre y que estaba muy bien. Lo malo de ir a algún sitio con la espectativa tan alta es que puede que te falle un poco y así fue, aún así tampoco está tan mal. Llegamos y tuvimos que esperar unos 10 minutitos porque, efectivamente, estaba lleno, pero tampoco era gran problema. Nos sentaron en una mesa. La apariencia del bar es de un bar de barrio de cervecitas normal y corriente. Tardaron un poco en atendernos ya que estaban un poco desbordadas, aunque no llevaban mucho orden, porque atendieron a personas que llegaron después que nosotros antes. Pedimos patatas gratinadas «El Castillo» y una pizza 4 quesos con pollo. Las pizzas son tamaño único y hay que decir que son bastante grandecitas. Las patatas no son las mejores que puedes probar, pegote de queso arriba y debajo las patatas que me resultaron incluso un poco duras. La pizza eso sí, estaba bastante buena. La masa crujiente y, copiando un poco el lema de una famosa pizzería, para mi «el secreto está en el tomate». Una buena pizza para mi tiene que tener un buen tomate. Y ésta era el caso. Después la cuenta bastante económico. Pagamos en total con las bebidas unos 15 € en total. En general, recomendable si eres de la zona de Dos Hermanas, pero tampoco como para desplazarte desde Sevilla o algún otro pueblo.

Si vas a ir al Castillo, hazte a la idea de que tendrás que ir muy temprano. Suele llenarse rápido y llegar a las 10.30 o 11, puede suponerte cenar bastante tarde. Sólo es un aviso. El sitio en sí es peculiar, aunque algo quizá agobiante. Está decorado en un estilo rural, no exactamente como un castillo pero con toques curiosos. En el centro del local, hay una especie de árbol enorme.
Han abierto una terraza para verano que hace que haya más sitio, si podéis id a sentaros por aquella zona, ya que si os sentáis en el salón de la entrada, la gente que espera mesa os atosigará un poco ya que el espacio está aprovechado al máximo y las mesas están muy juntas.
Y bueno, vayamos al tema clave, la comida. Yo habré ido unas 6 veces. Y bueno, las patatas castillo, son un clásico, y las ponen bastante cargadas, así que como entrante para grupo vienen genial. Luego, las pizzas están bastante buenas, hay gente que es fan total de sus pizzas, a mi me parece que las hay mejores.
Pero la carta no termina en eso, si en algo tiene éxito el local, quizá es por su variedad de carta. Podemos encontrar, baguettes, sandwiches, pescadito frito, y algunos platos de carne como el solomillo al queso cheddar que está bastante bueno.
Incluso, previo encargo, hacen cochinillo entero. Mis primos fueron para su cumpleaños y encargaron uno y al parecer, estaba delicioso.
En definitiva, tenéis que probar el sitio, porque encima, es bastante barato.