Andalucía en Gandia. Olé! vivan esas cañas bien tiradas, esas tapitas gratis, esas lonchas de jamón recién cortado, ese arte del camarero que te da conversación y te hace reír aunque vayas a tomarte un vaso de agua. Sin ir más lejos, lleva toda la semana con un delantal de vestido de sevillana porque si. Suenan sevillanas, banderas y escudos del Betis por doquier. En este bar se vive el fútbol y los toros. Dispone de una barra grande en la que el camarero se mueve con facilidad le da un servicio muy rápido. La cocina a la vista, que siempre da más tranquilidad. Los jamones, chorizos, lomos, colgados. Se huele la alegría y la buena comida. Este bar no entra en ninguna de las rutas de tapas, pero ni falta que le hace. No le falta gente nunca, y en los tiempos que corre, eso dice mucho del local. No he comido ahí más que bocadillos, pero la comida que he visto tiene muy buena pinta. Le tengo especial cariño por ser tan espontáneo, pero tengo que hacerme asiduo para probar sus muchos platos típicos.