Conocí este sitio porque mi marido trabajaba en el aeropuerto y a veces cuando querían «darse un homenaje» él y los compañeros iban a este restaurant. Me habló muy bien de él así que reservé mesa en la terraza para disfrutar de sus impecables vistas y…¡A disfrutar! Ante todo, imprescindible reservar. Sobre todo en verano. Yo tuve que reservar con dos semanas de antelación porque como no es un sitio grande y tiene buena relación calidad-precio en seguida se llena. Probamos una ración de coquinas, otra de chipirones fritos y una paella. Me gustó casi más el pescadito frito que la paella. La paella estaba buena pero las he probado mejores. La próxima vez que vaya encargaré una fideuá. Lo que más me gustó(además de las vistas) fue el trato recibido. Los camareros muy atentos y sonrientes. Por un momento me pareció estar en Andalucía con tanta alegría. Muy recomendable.