Ay, qué penita nos dió entrar a este sitio. La verdad es que tener un sitio de paellas en primera línea de playa es complicado: todo el mundo espera la paella del siglo por tres duros. Aquí tenían un menú que traía paella y un entrante. De entrante pedimos«tres tapas» que no nos gustó nada y la ensalada, que merecía más la pena. La paella nos decepcinó, estaba más caldoso de lo normal y, lo dicho, que teníamos muchas ganas :( Puede que volviera al sitio, pero si fuera con ganas de un buen arroz no.