Camping del Ampolla

Lo cierto es que no se puede negar que estando cerca del Delta del Ebro fuera inevitable el aluvión de insectos. Lo que no esperábamos es que el bungalow estuviera lleno de ellos nada más llegar. Deberían poner un cártel bien grande avisando de mantener puertas y ventanas cerradas en todo momento, sobre al caer la tarde.
El recibimiento fue peculiar, dado que como sólo podiamos aparcar un coche dentro nos tocó descargar y sacar el nuestro fuera, pero para cuando quisimos salir, el hombre de la entrada ya se había ido. Tuvimos que ir a buscarlo al bar (donde se suponía que estaba) y allí tuvieron que llamarle por teléfono para que nos abriera. Todo esto mientras nuestro coche hacía tapón en la valla de salida del camping. Muy profesional.
La zona es preciosa (alejándose un poco), así que el hecho de que la playa cercana esté bastante sucia (no la limpian hasta junio por lo visto) no nos pareció lo más importante.
Lo que sí es verdad es que la carretera colindante hace que los ruidos por la noche sean invitablemente molestos, por lo que los bungalows que están en esa zona no se libran del zumbido de motores intermitente.
El precio con descuento por temporada está bastante bien, eso sí, aunque habíamos confirmado previamente el precio con ellos telefónicamente, una vez allí, trataron de cobrarnos el precio habitual más caro. Buen intento.
Para un par de días se puede estar, para más, no lo recomiendo.

Ideal para ir fuera de temporada de verano, puesto que en verano tiene una discoteca justo al lado y no te dejarán dormir. Además tienen un riachuelo que pasa por medio del camping y los mosquitos se pueden cebar con cualquier mamifero, que se hospede alli.
Se encuentra a unos 50 metros de la playa, aunque yo recomiendo dar un paseo y buscar un entorno mas tranquilo lejos del ruido y los muchos cristales rotos (recordad: discoteca).
Pero por la amplia gama de instalaciones cuidadas que tienen, aunque no tenga piscina, sus precios no excesivos y el entorno lleno de vida donde está situado, merece la pena ir.