Nuestros acompañantes nos dijeron que en León se acude a los bares por la tapa que te ponen, y la verdad es que tenían toda la razón. Jo, qué tapas ponen en León, cuánto podríamos aprender(o recuperar) en Madrid en este sentido. ¡Qué rico! Llegamos allí y pedimos unos picudos(es lo que hay que beber en León, el vino picudo) y nos pusieron unas tostas de morcilla leonesa que se nos saltaban las lágrimas de los ojos de lo buenas que estaban. El lugar tiene también un comedor por si te apetece parar a comer, y una terraza que ponen cuando hacen buen tiempo. ¿De precio? Lo típico que cuando te dicen cuánto es piensas que se han equivocado y no te han cobrado la mitad de las bebidas.