Si paseando por la calle Espíritu Santo preguntas por Cuadros Dron casi todos te devolverán un gesto de desconocimiento. Los más fashion de Malasaña acompañarán su ademán con un «no me suena para nada», los más punkys(ya quedan pocos) con un «¿Cómo dices, Tron?. Pregunta por la Rusa, así es como es conocido el lugar en el barrio. Aunque ella es de Motilla de Palancar. No, es broma. Es rusa, rusa, su nombre es Natalia. Siempre suena música rusa en la tienda. El local llama la atención por su colorido, tanto por el rojo de la fachada como por los tonos de los cuadros que rellenan las paredes del pequeño local. Aquí no hay minimalismo estético. Es una fusión de la iconografía rusa, por los formatos en tablas de madera de los cuadros, con nuestro estilo Churrigueresco, por lo recargado de las paredes. ¿Y qué vende? Abajo tiene un taller. Inserta fotografías de cuadros famosos(Dalí, Frida, Kandisky, etc) en tablas de madera de distinto formato. También hay muchos cuadritos de gatos. Ella prefiere los perros, pero dice que en el barrio son más de gatos. Pásate, merece la pena una visita. Hay cositas por 2, 4, 6 euros que pueden arreglarte un cumpleaños. Lo importante es el detalle.
Nuria G.
Rating des Ortes: 4 Madrid
Pequeña, pequeñísima y preciosa tiendecita de originales mini cuadros. Su dueña, una mujer rusa, es un verdadero encanto. Siempre te recibe sonriente y te cuenta historias de su vida, de porqué tiene algunos de los cuadros, dónde los vió por primera vez, cuales son los detalles que más le gustan de la imagen y cosas por el estilo. Todos los cuadros son de madera gruesa, pintados a sangre y sin marco. Los motivos son de autores famosos, desde escenas míticas de Botero hasta ilustradores actuales como Rébecca Dautremer. Un lugar muy curiosos, por el que merece la pena pasarse.