Estebaranz 1997

Os recomiendo este sitio, como lugar imprescindible para salir de cañas. Vamos que casi comes aquí cuando te pides una cerveza, ya que te ponen muy buen aperitivo. Siempre está bastante lleno, sobre todo a la hora del vermut.
No dan menús, ni platos combinados, pero hacen bocadillos y montados muy ricos, ya que tienen plancha, y además los aperitivos son muy buenos, además, las consumiciones no son muy caras, son precios normales para una caña, que eso es importante en esta época de crisis.
Aquí lo que vais a encontrar es a gente tomando cañas y comprando botellas de vino, ya que tienen muchas botellas a la venta, bueno, no sólo venden vino, ya que también venden caldo casero y cualquier tipo de bebida.
Muy recomendable pedir una ración de boquerones en vinagre, ya que están buenísimos, también te venden si así lo quieres.
Los dueños son muy agradables, aunque también curran sus mujeres, el local no es muy grande, por lo que hay veces que es un poco agobiante tanta gente, pero la caña merece la pena.
Creo que, en la ruta de las cañas es imprescindible que paséis por este bar.