Filete Ruso

Diseño cuidado y excesivamente hipster, punto fuerte los filetes Rusos pero no son para tanto en mi modesta opinión. Trato amable ;)

Tenía muchas, muchas ganas de ir al Filete Ruso. Al principio pensé que sería como el de Barcelona, pero resulta que no. O por lo menos, no lo parece. El bar se llama así porque tienen una ración estrella, que son los filetes rusos, pero hay poco más en la intencionalidad. Ya he ido dos veces, y las voy a contar por separado:
1. A mediodía. Sabemos que hacen cocido los miércoles o los jueves, pero no podíamos ir esa semana, así que nos aventuramos un martes. La chica que nos atendió estaba un poco perdidilla, y se les notaba a todos un poco que no sabían dónde estaban. Yo lo achaco a que es bastante nuevo, pero bueno.
Nos sentamos y nos dice que solo tienen un plato del día. Y que esto es literal: es decir; no hay carta, no puedes pedir nada más. O te comes el plato del día, o nada. Cuesta ocho pavos y es una ración de marmitako, bebida y postre. Yo soy súper fan del marmitako así que nos quedamos. El plato estaba muy bueno, pero la verdad es que me quedé con un poquito de hambre. Al final es raro un menú del día cueste más de 10 € en los alrededores y te ponen dos platos, así que –aunque estaba muy, muy bueno, repito– me resultó un poco caro.
2. Un viernes por la noche. Estábamos entre ir al Bar La Gloria o aquí, y aquí terminamos, con la intención de comer un par de raciones. La carta es bastante pequeña y había ya un par de cosas tachadas, a las 21:30 de un viernes. Se lo achaco también a que probablemente estén empezando, y todavía no han pillado el tranquillo.
Pedimos, y después de pedir, la camarera nos informa de que se les ha acabado otra de las cosas que hemos pedido y proceden a tacharla de la carta. La verdad es que no sé cómo acabaría esa carta una hora después. ¿Quedaría algo?
Probamos los filetes rusos, que estaban muy ricos, los chapiñones (que no son más que unos champiñones con guindilla pasados por la sartén), las patatas bravas (muy ricas, bastante picantitas), un huevo acompañado y algo más que no recuerdo. Aunque todo estaba más o menos rico, la verdad es que la presentación es bastante mejorable. En el caso del huevo acompañado, por ejemplo, la verdad es que la cosa es MUY MEJORABLE. Cuatro patatas, dos trozos de butifarra y morcilla… No sé, no lo veo.
Entiendo la estética del local, no me molesta, me parece hasta romántico que lo hayan mantenido. Pero no entiendo la estética de las raciones: querer hacer cocina tradicional no está reñido con presentarla de forma apetecible, e incluso abundante. Es muy baratito de precio, no salimos a más de 15 € cada uno comiendo normal tirando a escaso, pero la verdad es que creo que deberían replantearse algunas cosas, porque tras mis dos visitas no me replanteo volver.

Ya está bien con los cutrebares que hacen de la caspa su estandarte, que no todo vale en las aspiraciones hipster.
El local es horroroso. El setenterismo tiene cero gracia en este caso. Es cutre, da sensación de sucio, decoración inexistente. La carta de raciones es enana (y reduciéndose por minutos, que iban tachando una a una todas las opciones a eso de, y las raciones en sí son ramplonas a morir y presentadas con toda la desgana del mundo (ese huevo «acompañao» que daba lastimita verlo, por favor) Hasta el pan está malo.
En resumen, que no vuelvo ni pagándome.

Nuevo local en al ciudad y en mi querido, y antiguo, barrio Conde Duque! Si siguiese viviendo ahí estaría todo el santísimo día entre las paredes de este bar. Antes, por si alguno no lo sabía, había un Asturiano aquí al cual nunca entré! Eso sí, me han dicho que han intentado mantener casi todo, por ejemplo las paredes son las mismas sólo que saneadas y el techo! Eso sí, lo han dejado muy bien, con bastante espacio y con dos zonas muy bien diferenciadas. la zona de la barra para apoyar codo y echarte unas cerves y unas tapitas; y la zona de comer con unas cuantas mesas!
A la inauguración no pude ir pero me dijeron que se petó así que intenté no tardar mucho en ir para echarle un ojo. Me encantó el ambiente, la energía de los que allí trabajaban y como no pues las cervezas bien tiradas con sus respectivas tapas!
Por si tampoco lo sabéis, Filete Ruso es el bar que ha abierto el antiguo dueño del Nasti (Viva el antro del Nasti!!!) que ahora se ha pasado con unos socios a montar esto y la verdad que ha tenido buena recepción. Allí había bastante gente el otro día :)
Tienen una carta variada y con buena pinta pero ya que estábamos ahí, en el bar con ese nombre pues pedimos una de filetes rusos! Estaban muy ricos! ¿Se pondrá de moda el filete ruso? Si lo han hecho las albóndigas yo creo que sí :) jajaja
Puedes desayunar, pedir menú, irte de cervezas, cenar y e incluso tajarte con un montón de bebidas!!!
Larga vida le deseo!