L lsola Bella

Muy buen sitio para comer algo rápido y barato. Yo probé un calzone de jamón y champiñones y unas bolas de arroz rellenas de carne picada. Ambos muy buenos, aunque un poco frío el relleno de la última. Lo recomiendo. La próxima vez probaré las pizzas.

Sí, este sitio está guay. Justo enfrente de esa plazita donde todo el mundo bebe cervecita y donde se solía hacer botellón. Da gusto que haya un sitio así donde te puedes comer una riquísima porción de pizza o plato italiano y no un bocadillo de un puesto de la calle asqueroso.
El precio es bastante aceptable y tienen varias opciones. Te lo dan calentito ipso facto. Parece que se han abierto un montón de establecimientos de este estilo y es que no me extraña por que triunfan bastante.
Hay unas bolas de carnes que están buenísimas y cualquiera de las pizzas que tienen te gustarían.

Me encanta la comida de este sitio. Es baratísimo, y te puedes tomar otra copa si sales por chueca o malasaña y estás «apretado» de pasta.
La pizza me encanta, sobre todo la biancanieve, con nata, queso gorgonzola y nueces. Los arancini son muy originales, yo nos los conocía. Son bolas de arroz rellenas de carne picada, queso y guisantes.
Nosotros nos lo vamos comiendo por la calle, bien preparado para llevar.
Hay otros dos más en Madrid, pero este de Pelayo tiene su encanto, y por la zona de Gran Vía hay un montón de sitios donde poder sentarse a ver a la gente pasar con un buen trozo de pizza en las manos.

Ya lleva unos cuantos años este local tan original, el único que yo conozco dedicado a la «comida italiana para llevar». Pasta, pizza y mucho más, un montón de especialidades italianas recién hechas, para llevar o tomar rápidamente en el pequeño espacio disponible. Es un local angosto, con un mostrador lleno de delicias italianas listas para tomar o calentar. Una especie de «fast food» que parece arrancado de cualquier calle del país transalpino y transplantado en esta calle de Chueca. De la calidad de sus pizzas, pastas y postres da fe su numerosa clientela, pues el local está siempre lleno, cualquier día a cualquier hora. Y es que la comida italiana tiene éxito en el mundo entero y estos platos al gusto de todos te sacan de un aprieto en cualquier momento. Sin duda es un lugar para conocer y tener en cuenta.

Creo que en esta ocasión voy a ser totalmente parcial, y es que lo que tengo con esta pizzería es ya catalogable como adicción.
Las porciones de pizza son a 2.5 euros y tienen muchos tipos diferentes; están muy buenas, la única pega es que la masa es tipo bollo de pan, yo prefiero masa fina, pero siguen estando muy buenas. Además tienen un montón de especialidades como calzones, enrollados, bollos rellenos, pasta y demás. Yo las he probado prácticamente todas y me quedo con una especie de bollo de pan relleno totalmente de queso que hace que corras el peligro de salpicar de queso a los que te rodean al morderlo.
También os recomiendo los arancinis: bolas de arroz rebozadas y fritas, rellenas de queso y carne picada o espinacas. Vamos, muy light todo. La comida se puede llevar y comer allí mismo, aunque la barra habilitada para tal fin es muy pequeña.
Para quedarte cebado de comida, no desembolsarás más de 7 euros.