Nada recomendable, camareras antipáticas, bocadillos escasos, parece que te hacen un favor por ponerte un bocadillo, huele mal, w.c. mejor verlos, no volveré.
Susana I.
Rating des Ortes: 4 Madrid
No hay nada como un buen bocata para desayunar y después acostarse después de una gran noche de juerga. La variedad es lo mejor y lo peor, porque es muy difícil decidirse. Que si frio o caliente, que si bacon con queso o lomo con queso… Y lo peor de todo, que todos está buenos. El local no es excesivamente grande pero merece la pena visitarlo y hacerse hueco para disfrutar del bocadillo elegido. Sitios así debían crear franquicias por todos los barrios de Madrid y difundir nuestra tradición del bocadillo.
Paco P.
Rating des Ortes: 3 Madrid
La meca de la baguette es un bar de bocadillos con una carta extensa, sabrosa y con muy buenos precios. Pero su fama se la ha ganado por abrir muy, muy pronto los fines de semana y así acoger a todas las aves nocturnas que vuelven de fiesta y están deseando desayunar(muchos de ellos desayunan en vaso con hielos). Tienen bocatas calientes y fríos que entran que da gusto a esas horas, y además puedes pedir croquetas y algunas otras raciones. La verdad es que todo está muy bueno, y no es porque a esas horas y con copas todo te entre bien, no, objetivamente, los bocadillos están muy buenos. A esas horas crápulas mencionadas, la parroquia es de lo más peculiar, y es un sitio ideal para matar la fiesta, continuarla un rato más, o pausarla y recargar pilas antes de seguir.
Araceli O.
Rating des Ortes: 4 Madrid
Cuando mi chico vivía en la zona, nos hacía gracia: este bar esta siempre abierto. Bueno, abre las noches de los fines de semana y eso, para nosotros, es SIEMPRE. Los bocatas no están nada mal, especialmente porque pillan en el mejor momento: cundo uno vuelve de fiesta y, como dice el grupo de Facebook, puede irse a casa y emular a Ferrán Adriá, o venirse aquí y coger un bocadillo, frío o caliente. Últimamente la gente se lo pide con la última(copa, se entiende), digo yo que será para tragar… Y porque no son nada caros.