Piedra de Luna

Es la típica tienda de baratijas importadas de zonas más o menos exóticas de Asia. Mucho objeto de decoración, incienso, plata, pero poco más de lo que pudieras encontrar en otras tiendas similares de cualquier lugar de playa. La ventaja es que está en Madrid, y si quieres comprar alguno de esos objetos no conozco muchos otros lugares que tengan similares productos.

Para mi gusto… Ni fu ni fa. El sitio en sí está muy chulo decorado, tiene ese aire místico con un olor a incienso que resucitaría a un muerto que tanto me gusta pero en cuanto a lo que venden… Para empezar es caro. Para seguir, son las típicas cosas que veía en el mercadillo medieval de verano cuando iba a la playa con mis padres. No es que no tengan cosas chulas, es que me parece que los precios son desorbitados.
Sí que había alguna que otra cosilla interesante: tienen las míticas joyas de piedras que van con un papelito que te explica sus propiedades que son la delicia de algunas madres (como la mía), y esos anillos de coco tan chulos, pero no sé… Me sigue pareciendo que el verdadero encanto de esta tienda es la decoración.

Siempre que voy encuentro algo que me gusta. Es una tienda con mucha mezcla de cosas. Hay decoración, con toques orientales y árabes, pero también ropa, complementos, bisutería, y siempre huele a incienso. Si te gusta este estilo es genial, porque hay muchas cosas para uno mismo y para regalar, mis regalos de ahí siempre han triunfado, porque se los he hecho a personas que eran muy de ese «rollo». La señora que atiende además es un encanto, y yo lo que suelo hacer es pedirle consejo, le digo para quién es el regalo, edad, gustos, presupuesto… y voilà, ella me enseña 10 cosas distintas para quedar divinamente.

Piedra de Luna es una de éstas tiendas en las que te comprarías todo.
Tienes desde lámparas, figuras para decorar la casa, fulares… y sobre todo los anillos y colgantes de piedras semipreciosas.
Tienen una vitrina muy grande con todo de complementos de nácar, ámbar, labradoritas, cuarzos rosas… bueno! una pasada.
También tienen ropa, aunque en menos cantidad, muy bonitos los blusones para la playa.

Piedra de luna es una de esas tiendas a las que prefiero ir sin mucho dinero. Tiene una barbaridad de artículos de decoración a cual más bonito traídos de diferentes lugares del mundo. Como casi todas las tiendas de este tipo está ambientada con música y huele a incienso o esencias. La mujer que atiende es muy agradable y siempre está dispuesta a echarte una mano para que encuentres lo que buscas o para darte ideas. De los productos de la tienda lo que más me llama la atención es la especie de silla que está expuesta en el escaparate y que parece un trono de madera. Es una tienda a tener en cuenta si tienes que hacer algún que otro regalo.